La empresa concesionaria de la gestión de los residuos de Mallorca, Mac Insular, calcula que el 60 por ciento de los residuos de demolición y voluminosos que se generan en Mallorca acaban en plantas ilegales de tratamiento o directamente en vertederos ilegales. La consecuencia directa es que, dado que los escombros no llegan a la concesionaria, es imposible bajar las tarifas. De hecho, la empresa cerró el año pasado con unas pérdidas de 2,3 millones de euros.
Un portavoz de la empresa afirmó que esta es una de las cuestiones que quieren plantear a la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Salom, a quien han solicitado una reunión tras conocer las intenciones de la institución insular de rescindir el contrato con la concesionaria.
Rebaja
La empresa quiere explicar a la presidenta que ha propuesta medidas de contención de la tasa tanto al anterior gobierno del Consell como al actual equipo de Medi Ambient sin que hayan recibido una respuesta.
Por su parte, los empresarios industriales de PYMEM enviaron ayer un comunicado en el que denuncian el monopolio de la empresa que gestiona escombros y voluminosos, así como las tarifas «abusivas» de la empresa de tratamiento.
Ante la posibilidad de que se rescinda el contrato con Mac Insular, los empresarios se preguntan en la nota quién va a sufragar los gastos del rescate. También los empresarios han solicitado una reunión con los responsables del Consell de Mallorca para plantearle estas inquietudes.