La red viaria de Mallorca ha recuperado la normalidad con la reapertura de todas sus carreteras, que habían sido cerradas al tráfico por la nieve, según ha confirmado a Efe el departamento de Carreteras del Consell de Mallorca.
Las últimas vías en reabrirse esta tarde han sido la Ma-10 entre el Coll de Sa Batalla y Sóller y la Ma-1101 de Puigpunyent a Esporles.
Hasta cuatro carreteras han estado cortadas hoy por el temporal de frío y nieve que azota estos días a Baleares y la Península.
Carreteras no descarta que durante la noche y esta madrugada tenga que volver a cerrar la red viaria de la Serra de Tramuntana, la más afectada por las nevadas caídas sobre Baleares desde el viernes.
Jornada de ayer
Gran parte de Mallorca volvió a amanecer ayer gélida y cubierta de blanco, también en Palma, si bien, a diferencia de la nevada histórica del sábado, en esta ocasión la nieve aguantó menos tiempo, ya que a lo largo del día el sol la fue derritiendo, aunque las temperaturas aún fueron gélidas, alcanzándose los 5,7 grados bajo cero en la estación de la Universitat balear. Por la noche la cota de nieve empezó a ascender y ya hoy se sitúa en los 500 metros de altura.
En la jornada dominical tampoco se produjeron incidentes graves, pero la nieve y, sobre todo, las placas de hielo formadas provocaron algunos problemas: hasta diez tramos de carreteras permanecieron ayer cortados, en la vía de cintura de Palma algunos coches se salieron de la calzada y el tejado de una vivienda de la calle Regal de Ciutat se vino abajo de forma parcial, sin causar daños personales, por el peso de la nieve. También cedió el techo de la carpa de la pista de hielo instalada en la Plaça d'Espanya de Ciutat por el peso de la nieve acumulada, con cinco menores dentro, ninguno de los cuales resultó dañado. Desde el 112 se registró un 50 por ciento más de llamadas que en un fin de semana convencional.
La agricultura ha podido ser una de las grandes damnificadas por el desplome del termómetro. de hecho, el conseller d'Agricultura, Biel Company, se trasladó ayer a sa Pobla para comprobar los efectos de la helada en la cosecha de la patata temprana, si bien la evaluación final de daños aún no se conoce.
Festivo
Las conexiones aéreas también se vieron afectadas por la ola de frío siberiano, con retrasos en los vuelos, según informóAENA.
Pero al margen de los problemas, para la mayoría de los ciudadanos, mayores y pequeños, el domingo helado fue una nueva oportunidad para salir a pasear por ciudades, pueblos, playa o montaña para disfrutar de la nieve, ese elemento tan poco habitual a nivel del mar.
Las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) se cumplieron y la nieve volvió a hacer acto de presencia a nivel del mar.
Esta vez el récord de frío lo marcó la estación situada en el campus universitario de Palma con 5,7 grados bajo cero.
El aeropuerto de Palma marcó la misma mínima que Lluc, ambos registraron 4,4 grados negativos.
Agustí Jansà, director de Aemet en Baleares, destacó la importancia de este valor: «En el Año de la Nieve (1956) y en la antigua base aérea de Son Sant Joan, sabemos que se registraron hasta -10ºC», explicó.
«En 1985, las temperaturas en el aeropuerto mallorquín llegaron hasta los -6ºC, y ayer se marcó el tercer registro más bajo del que tengamos constancia con -4,4 grados de mínima».
Jansà aseguró que la máxima de ayer en el aeropuerto fue significativa: «La máxima de 4,8 grados ha marcado el día más frío en el aeropuerto en 40 años», concluyó. Esta situación provocó un récord de consumo de gas, con 412.734 m3, no así en la demanda eléctrica.
El temporal irá remitiendo y, a partir del miércoles, se normalizarán las temperaturas en la Isla después de la primera ola de frío polar del invierno.