Con motivo del bicentenario de la muerte del que fue comandante general de Balears Gregorio García Cuesta, el Capítulo de la Catedral de Mallorca le dedicó ayer un responso a propuesta del erudito José Manuel Rodríguez Gómez.
La oración fue oficiada por el por el deán de la Catedral de Mallorca, Joan Bauzà, quien agradeció a los presentes su asistencia e interés por la figura del general.
Bauzá recordó las numerosas almas que descansan bajo la Catedral: «Humildes, civiles, militares», dijo precisamente cuando el Obispado ha encargado el estudio de los cuerpos que han sido enterrados en La Seu hasta que la práctica se prohibió, en el siglo XIX.
Rafael Duran Tapia, director del Aula Weyler y miembro de la asociación del Museo Histórico Militar del Castillo de San Carlos, recordó la figura del máximo responsable militar de las Islas a principios del siglo XIX. Gregorio García de la Cuesta y Fernández de Celis (La Lastra, Cantabria 1741 - Palma 1811), ocupó la Capitanía General de las Islas en dos momentos distintos, en 1796 y 1811.
Victoria de Talavera
Participó en la Guerra del Francés, consiguiendo, con el Duque de Wellington, la victoria de Talavera, en Castilla.
La sepultura está situada en la capilla de San José y su lápida reza: «Muy excelentísimo señor Gregorio García de la Cuesta general de los reales exércitos y del reino de Mallorca, presidente de su real audiencia y de la junta superior, caballero gran cruz de la distinguida orden de Carlos III, regidor perpertuo de la villa de Madrid y socio benemérito de las reales sociedades mallorquina y cantábrica, murió el 26 de noviembre de 1811.