El Comité de Empresa y los sindicatos SPIB, STEI, CCOO y UGT, presentes en la Radiotelevisió de Mallorca, han exigido la dimisión de la Directora General de Trabajo y Salud Laboral, Juana Maria Camps Bosch, por la «carencia de neutralidad» en la tramitación y resolución del Expediente de Regulación de Ocupación que autoriza el despido de toda la plantilla del Ente, y ha anunciado que llevará a cabo acciones legales por este motivo.
En un comunicado, todos ellos aseveran que en la tramitación y resolución del ERE la Dirección General «ha dejado en indefensión al Comité de Empresa» por haber vulnerado «el principio de igualdad de armas entre las partes en conflicto y el principio de imparcialidad al haber dado ilegal y extemporáneamente la oportunidad a la empresa de enmendar los defectos detectados en su solicitud».
«En consecuencia, exigimos la dimisión de la Directora General de Trabajo, responsable de la tramitación del ERE, y manifestamos que deja de ser una interlocutora válida», han subrayado desde el comité de empresa, quienes han anunciado así que llevarán a cabo las acciones legales pertinentes «en defensa de los derechos de los trabajadores y en demanda de las responsabilidades de todo orden en que haya podido incurrir la Dirección General».
Por su parte, el Grupo de consellers socialistas del Consell de Mallorca han lamentado «profundamente» el despido de más de un centenar de trabajadores de la empresa pública, que la Dirección General de Trabajo del Govern ha autorizado para el próximo día 1 de enero.
«Es muy triste para los profesionales y para sus familias, empezar el año de este modo. Seguramente será uno de los años más tristes de su carrera profesional», ha puesto de manifiesto el portavoz del Grupo, Jaume Garau, quien ha aseverado que todos ellos podrán quedar sin trabajo y obtener una indemnización de tan sólo 20 días por año trabajado después de que Trabajo haya aceptado realizar un expediente de regulación de ocupación por causo objetiva.
En este contexto, Garau ha opinado que «se han vulnerado los derechos de los trabajadores» puesto que la decisión de cerrar el Ente «es política y no económica». Por otra parte, los socialistas han acusado al PP de «hacer todo lo contrario a lo que dicen». «Resulta increíble que digan que crearán puestos de trabajo y lo único que hacen es destruirlos», ha remachado el portavoz socialista.