Antoni Real Ramis, presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Balears (COFIB), reconoce que la situación que atraviesan los farmacéuticos de las Islas es difícil, de hecho concreta que «nos encontramos ante una situación insostenible» y añade que la Administración debe a los farmacéuticos 64 millones de euros de los medicamentos de la Seguridad Social.
-Acabamos de saber que la deuda con los farmacéuticos, lejos de disminuirse, ha aumentado a 64 millones de euros. ¿Hasta cuándo se podrá sostener esta situación?
-La situación es absolutamente crítica. Por responsabilidad con los ciudadanos los farmacéuticos hemos contratado créditos para que puedan seguir accediendo a sus tratamientos, aunque desde septiembre estamos avisando de que muchas farmacias no pueden hacer frente a la renovación de stock y está comenzando a producirse desabastecimientos de determinados medicamentos. A principios de octubre, desde la Administración se adquirió el compromiso de no aumentar la deuda con los farmacéuticos, y aceptamos cobrar esta deuda dentro de los presupuestos de 2012. Este compromiso no se ha cumplido y este mes se ha aumentado la deuda en 12 millones más.
-¿El impago compromete seriamente la viabilidad de prestación farmacéutica?
-Lo adeudado significa una media mensual de entre 40.000 y 45.000 euros por farmacia. Los retrasos en el pago y sobre todo la incertidumbre de saber hasta cuándo seguiremos sin cobrar comprometen muy seriamente la gestión, planificación y viabilidad de las farmacias. Lo más preocupante es que hay farmacias que tienen dificultades para dispensar medicamentos básicos para mantener el tratamiento de los pacientes. Entre ellos tenemos tratamientos para cáncer, trasplantes, antidepresivos, etc. Es absolutamente incomprensible que por el impago de la Administración estos ciudadanos encuentren dificultades para acceder a los medicamentos de la seguridad social.
-Entonces, los medicamentos que se lleva el ciudadano a través de la Seguridad Social, ¿quién los paga?
-Cada vez que un ciudadano acude a una farmacia con las recetas de la Seguridad Social el propio farmacéutico adelanta de su bolsillo los medicamentos que se le entregan. Esto ocurre siempre, no solo ahora que la Administración adeuda las recetas de casi cuatro meses. Lo que ocurre es que habitualmente el Servei de Salut de les Illes Balears (IB-Salut) pagaba al mes siguiente la cantidad adeudada, aunque ahora lleva desde las recetas de mayo habiendo pagado una mensualidad y el 32% de otra. Podemos decir que desde mayo todos los medicamentos de la Seguridad Social están financiados por los farmacéuticos.
-¿Qué acciones de protesta se han planteado los farmacéuticos de Balears?
-Los farmacéuticos estamos en una situación insostenible. No podemos financiar más los medicamentos de la población, ni el SNS, ya que se ha llegado a un punto límite donde peligran numerosos puestos trabajo, pagos a proveedores, nóminas, alquileres o hipotecas de los locales, entre muchos otros. Además, los farmacéuticos estamos sosteniendo el sistema de receta electrónica, tanto profesional como económicamente, y no podemos pasar más tiempo sin que la Administración asuma su responsabilidad.
-Y todo ello cuando los márgenes de beneficios de los medicamentos están por los suelos...
-Los márgenes que se llevan las farmacias del precio de los medicamentos son bajísimos. Algunos medicamentos no resultan rentables por su escaso margen, pero los farmacéuticos los dispensamos y cumplimos siempre con nuestra obligación y exigimos que la Administración también cumpla su parte.