La segunda fase de la 'operación Ossifar', la supuesta corrupción en Emaya durante la pasada legislatura, arrancó ayer con la detención de una empleada de esa empresa pública, L.J.Z. y la imputación de más empresarios.
La Fiscalía Anticorrupción y el Grupo de Patrimonio de la Policía Judicial de la Guardia Civil, junto con agentes de la Policía Nacional se personaron ayer en Emaya para detener a L.J.Z, dirigente de la extinta UM y que formó parte de la candidatura de esa formación en las elecciones a la alcaldía de Palma en 2007.
Es probable que algunos de los nuevos imputados en la causa se añadan a la lista de detenidos dependiendo del contenido de sus declaraciones, según confirmaron fuentes judiciales.
Contratos
La segunda fase de la 'operación Ossifar' que instruye bajo secreto el Juzgado de Instrucción número 2 de Palma, apunta a destacados exdirigentes de UM, como Miquel Nadal y Cristina Cerdó, así como a empresarios que, supuestamente, habrían sido beneficiados con contratos manipulados y que les habrían significado pingües beneficios. La causa arrancó en los juzgados el pasado mes de marzo, con la detención de la exgerente de Emaya Malén Tortella, el exresponsable de Medi Ambient de esa empresa Germán Chacártegui y el administrador de Seguridad y Limpiezas, Juan Pocoví.
La Fiscalía investiga desde hace meses un supuesto trato de favor por parte de los políticos responsables de Emaya, empresa que estaba en aquel entonces gestionada por Unió Mallorquina, en la adjudicación de los contenedores, que se hizo por un valor de 11.000 euros cada uno, cuando el precio medio de mercado era de unos 7.000 euros. El dinero supuestamente malversado superaría los dos millones de euros.
Informes
Precisamente, el exdirector de la empresa municipal de aguas de Palma Germán Chacártegui fue el encargado de emitir un informe favorable para la adquisición del estos contenedores a la empresa suministradora «Seguridad y Limpiezas S.A.», de la que es administrador único Juan Pocoví.
Chacártegui ha colaborado con los investigadores denunciando una supuesta trama orquestada en Emaya a través de un departamento 'fantasma, orientado a la ciudadanía, para pagar a agentes electorales de UM.