Esquerra Unida ha advertido que la paralización de la reconstrucción de las viviendas del barrio palmesano de Corea tendrá consecuencias nefastas para las familias que allí residen puesto que «serán enviadas a la calle» por el nuevo equipo de gobierno municipal.
Así lo han asegurado este martes en un comunicado, en el que cuestiona la reforma de dicho barrio planteada por el PP y en el que se critica la decisión del Ayuntamiento de paralizar las obras de rehabilitación iniciadas hace unos meses.
Con todo, la formación de izquierdas contrapone dos tipos de rehabilitación que se han llevado a cabo en Palma; la del barrio del Puig de Sant Pere, que, según el partido, preservó su «personalidad» e implicó una «ganancia para sus moradores"; y la del barrio de Sa Gerreria, en la cual «se pagaron indemnizaciones «misérrimas que no permitían adquirir una nueva vivienda a las familias que residían en este lugar», argumentan al respecto.
En este sentido, EU cuestiona cuál será el modelo de reforma en Corea que propone el alcalde de Palma, Mateo Isern, y aseguran que «todo indica» que será el mismo que impulsó la entonces alcaldesa de Palma, Catalina Cirer, en Camp Redó, basado en «bloques de seis y siete plantas con pocos equipamientos e indemnizaciones que contemplan el valor de mercado actual de las viviendas».
Por último, desde el partido consideran que, si se sigue este modelo, se «obligará» a los propietarios actuales a «abandonar» el barrio de Corea, por lo que solicitan a Isern que «clarifique» cuál es el modelo de reforma para esta zona, tras el anuncio de la paralización de la reconstrucción del barrio al detectar su «inviabilidad económica, urbanística y social».