Los trabajadores del centro de atención a personas con autismo Gaspar Hauser se han manifestado hoy a las puertas del Consolat de Mar para reclamar los 500.000 euros que el Govern adeuda a 65 trabajadores que llevan desde el mes de junio sin cobrar y que dicen encontrarse en una «situación límite».
La secretaria general de FETE-UGT Baleares, Carmen Santamaría, ha explicado hoy que desde hace un año estos trabajadores han tenido dificultades en el cobro de sus nóminas, y desde el mes de junio no han recibido ningún pago, hecho que implica tres nóminas perdidas, más atrasos.
Santamaría ha manifestado que la situación es desesperada, puesto que se trata de familias mileuristas que requieren de la nómina para hacer frente al día a día y ahora no pueden pagar la hipoteca e incluso tienen dificultades para cubrir necesidades tan básicas como la comida.
Estos trabajadores, entre los que se incluyen desde cuidadores y psicólogos hasta personal de limpieza y cocina, han continuado trabajando, ya que, desatender sus labores supondría dejar de ayudar a los niños autistas y a sus familias.
La secretaria general de FETE-UGT ha dicho que la concentración ha tenido efecto y han conseguido una reunión con miembros del Govern, que sólo han atendido al comité empresarial, ya que, según ha comentado Santamaría, la gerente del centro Gaspar Hauser, Maribel Morueco, ha considerado inapropiada la presencia de UGT.
El sindicato se ha mostrado sorprendido ya que, según ha afirmado, la propia empresa acudió a ellos en diversas ocasiones para pedirles apoyo e incluso consiguieron que la Conselleria de Educación abonara dinero para pagar unas nóminas.
El centro pertenece a una asociación de padres autistas de las Baleares y depende de las subvenciones de la Conselleria de Educación, Asuntos Sociales y el Consell Insular.
Santamaría ha querido destacar que hay padres que han traído a sus hijos para dar una lección de democracia, ya que, según ha señalado, es «una lucha por los derechos».