Palma está sucia, en las papeleras de algunas zonas no cabe más basura; y ante esta situación, PSOE y PP se culpan mutuamente. Así, desde el gobierno de Mateo Isern recuerdan que el responsable d'Hisenda durante la pasada legislatura, Andreu Alcover, decidió no contratar a unos 150 trabajadores para cubrir las vacaciones que el personal de Emaya disfruta entre abril y el 30 de septiembre; con esta medida se pretendía ahorrar 1,5 millones de euros. No obstante, se acordó con los sindicatos contratar personal en julio y agosto.
Por su parte, los socialistas culpan a los populares del «aumento de la suciedad y piden medidas urgentes». Además, reprochan que haya personal de Emaya limpiando en Sóller, mientras las calles de Ciutat están sucias. Alcover asegura que los problemas de tesorería de la empresa no impiden la contratación de 50 personas durante julio y agosto.
Más limpieza
Por otra parte, el gobierno de Isern anunció ayer nuevas medidas para mejorar la limpieza y paliar el descenso de personal. Así, Emaya limpiará a partir de hoy 40 puntos de contenedores en 30 calles del centro de Palma. Fuentes municipales informaron que, por primera vez, un equipo de agua a presión trabajará hasta la próxima semana y por primera vez en el acondicionamiento de los depósitos de recogida de residuos. A esta actuación hay que sumar otras que se han implantado este verano, como baldear a diario las calles del centro de Ciutat, el Passeig Marítim y la Platja de Palma. Además, se ha incrementado el vaciado de las papeleras los días que hay crucero.
Fuentes municipales argumentan que al descenso de personal hay que añadirle el incremento de visitantes; al tiempo que reiteran que la frecuencia de limpieza del centro es la misma que el verano pasado.