El ruido enfrenta a vecinos y restauradores de sa Gerreria, sa Llotja y la calle Fábrica

Los enfrentamientos entre vecinos y restauradores van en aumento y se están extendiendo a diferentes zonas de Palma. Así, a los problemas que ha generado la ruta 'martiana' en sa Gerreria, hay que sumar los conflictos de la calle Fábrica y sa Llotja.
Si hace una semana parecía que los problemas de sa Gerreria estaban resueltos tras el inicio de la declaración de la Zona Acústicamente Contaminada (ZAC), los restauradores asociados a la ruta 'martiana' han escrito una carta en la que desmienten que hayan consensuado con el gobierno de Isern cerrar a las 00:00 horas en invierno y a las 00:30 horas en verano. Además, consideran que esta propuesta crea inseguridad jurídica y es un agravio comparativo con otras zonas que pueden cerrar más tarde. Los restauradores de la ruta 'martiana' también reprochan al PP que la declaración ZAC va en contra de su programa electoral, ya que no crea empleo ni dinamiza la ciudad. Finalmente, denuncian que aún no se han podido reunir con el alcalde Isern para abordar este tema, aunque sí lo han hecho con cinco regidores del gobierno.
Medidas más restrictivas
Por su parte, la Asociación de Vecinos del Puig de Sant Pere solicitará una reunión con el alcalde para pedirle que se apliquen medidas más restrictivas en sa Llotja. «Pedimos que como mínimo nos traten como a otros», espetó la portavoz de la citada asociación Feli Marcos, en referencia a la propuesta de cierre de sa Gerreria. Además, recuerda que hace tiempo que están pidiendo que los bares cierren a las 00:00 horas, que es cuando empiezan los problemas de ruido.
La Asociación de Vecinos Es Raval de Santa Catalina presentó registró ayer un escrito en el que le comunica al alcalde que los vecinos de la calle Fábrica y las adyacentes «se quejan diariamente del ruido infernal que genera el eje cívico de Santa Catalina». La asociación denuncia que «el ruido supera los decibelios permitidos, se sacan más sillas de lo permitido» y los vecinos tiene problemas para entre en sus domicilios.
Frente a todas estas discrepancias, Cort asegura que no responderá a presiones y sólo obedecerá a criterios legales, técnicos y objetivos. Además, aclara que el horario de cierre de sa Gerreria lo determinarán los estudio de la patrulla verde y recuerda que el pleno aprobó una propuesta que aún no se aplica. Aunque los tribunales dicen que prevalece el derecho al descanso, la intención de Cort es conciliarlo con el derecho al ocio y la creación de empleo.