La huelga de los controladores alemanes, anunciada para este martes desde las 04.00 a las 10.00 GMT, quedó desconvocada hoy tras recurrir la patronal a la formación de una comisión de arbitraje con el sindicato del sector (Gdf).
La medida del Departamento de Seguridad Aérea (DFS) se produjo inmediatamente después de un dictamen de la justicia laboral, en segunda instancia, por el que se autorizaba la huelga.
El sindicato Gdf pretendía realizar este martes un paro, que habría implicado el cierre del espacio aéreo alemán durante seis horas, afectado a unos 3.000 vuelos, en los 16 aeropuertos internacionales del país, y a un total de 400.000 pasajeros.
Se trataba, de haberse concretado, de la primera huelga de controladores en Alemania, contra la que tanto el gobierno de Angela Merkel como la DFS y el conjunto del sector se han movilizado, por vía judicial y política, por sus perjuicios tanto en el ámbito aéreo como de la economía alemana.
La Magistratura, que una semana atrás prohibió una huelga similar la anunciada, dictaminó hoy en primera instancia a favor del paro y en contra del DFS, que había presentado una demanda alegando los perjuicios para los pasajeros.
El DFS reaccionó a este dictamen con otro recurso de urgencia, a lo que siguió la decisión en segunda instancia ratificando la legitimidad de la huelga.
A ello siguió la inmediata llamada a la formación una comisión de arbitraje, lo que de acuerdo a la ley alemana implica, de facto, la desconvocatoria de la huelga.
A la espera de las decisiones judiciales, las grandes aerolíneas alemanas, como Lufthansa y Air Berlín, habían decidido adelantar algunos de sus vuelos a primeras horas de la madrugada, para paliar al menos parcialmente los efectos del paro.