Hace un par de semanas que se ha iniciado el período de pruebas en todo el tendido del cableado, con el fin de fijar la tensión y la conversión de los cables. El proyecto realizado para conectar eléctricamente la Península y Mallorca con el cableado submarino, es muy vanguardista a nivel internacional, complejo y muy sofisticado necesita de este tipo de pruebas, para así tenerlo todo ultimado. El objetivo es que se pueda reponer fluido eléctrico procedente del Sistema Eléctrico desde la subestación de Sagunto a la de Santa Ponça a finales de septiembre o propios de octubre», señala el presidente de Red Eléctrica España, Luis Atienza, que se encuentra en Palma participando en la Copa de Vela del Rey.
Atienza reconoce que la inversión realizada es muy elevada (375 millones de euros), «pero ganamos en términos de capacidad de sustitución de generación térmica al reducir emisiones de CO2 y además se gana en seguridad de suministro, porque Balears se incorpora al sistema eléctrico europeo, con lo que mejorará la calidad y el suministro al contribuyente».
La infraestructura instalada aportará a Mallorca la misma capacidad de generación que una central térmica, equivalente al 20 o el 25 por ciento de las posibilidades actuales de generación eléctrica en la Isla.
Energía limpia
El presidente de Red Eléctrica puntualiza que con el cable eléctrico «se añade una central eléctrica adicional a Balears, porque al estar fuera de las Islas garantiza el suministro y, encima, no castiga al medio ambiente general, ya que la energía eléctrica que se va a suministra a Mallorca es mixta, procedente de generación hidroeléctrica, nuclear y de renovables, éstas en torno al 35%».
Otro aspecto que destaca Atienza es que al reforzarse el sistema eléctrico insular, hay menos posibilidades de que se produzcan apagones. «A partir de que entre en funcionamiento, se refuerza la solidez de suministro con la capacidad adicional de energía eléctrica que se canalizará desde la Península, lo cual proporciona robustez y seguridad a la red eléctrica en la Isla», aclaró Luis Atienza.
Respecto a las conexiones entre Mallorca y Menorca, así como entre Mallorca y Eivissa, «ambas están contempladas en dos fases sucesivas, para que en tres o cuatro años podamos tener interconectadas eléctricamente las cuatro islas, mejorando con ello el suministro energético en todo el archipiélago».