CCOO Illes Balears considera que hay que ser prudentes tras conocer los datos del paro publicados este martes «porque todavía no se confirma la recuperación económica y se mantiene la alta temporalidad contractual».
Con todo, el sindicato se refiere al descenso del paro en 1.135 personas (-1,57%) en julio con respecto al mismo mes de 2010, con lo que suma el cuarto mes consecutivo con bajada interanual del paro. No obstante, CCOO ha precisado que el 75% de este descenso del desempleo anual se explica en la bajada del paro entre la población extranjera. El paro entre la población inmigrante baja un -5,6% (-1.037) y se sitúa en 17.402 registros.
En comparación al mes de junio, el paro baja en -514 personas (-0,72%) y con este son ya ocho meses de bajadas intermensuales, «cosa que no se observaba desde el año 2010», ha indicado a través de un comunicado.
Subida de la afiliación estacional
También destaca el sindicato la subida de afiliaciones en comparación en julio de 2010, en 1.383 personas, por lo que «por segundo mes consecutivo tenemos variaciones anuales positivas que son todavía muy leves como por habla de mejoras estructurales». En el panorama nacional, solamente Baleares y las Canarias muestran un crecimiento de la afiliación.
Por su parte, la subida mensual es de 11.076 afiliaciones y la variación es del 2,43%. «La subida estacional vuelve a ser mayor que la observada en julio de 2010 y de 2009, tanto en términos absolutos como relativos, y este es el sexto mes consecutivo de subidas intermensuales. Estos aumentos son propios, según CCOO, «de nuestra estacionalidad, por lo que es previsible que se reproduzca el patrón estacional con una bajada mensual por el mes de agosto».
Con todo, el secretario de Ocupación y Comunicación de CCOO, Francesc Mellado, ha señalado que «no podemos dejar de considerar que con estos datos hay muchas personas que salen del pozo tan duro de la desocupación cuando consiguen un trabajo, pero debemos ser realistas y pensar que esta situación podría ser coyuntural». Así, ha afirmado que «habrá que ver qué pasa en septiembre cuando se acabe la temporada turística. Además las perspectivas no son alentadoras si tenemos en cuenta el futuro de la ocupación pública».