Las obras del Palacio de Congresos de Palma se reanudarán a principios del mes de septiembre, después de que el Govern pague parte de los 20 millones de euros que adeuda a Acciona. Este fue el acuerdo que alcanzaron ayer el jefe del Ejecutivo autonómico, José Ramón Bauzá, y el alcalde de Palma, Mateo Isern, con el presidente de Acciona Infraestructuras, Pedro Martínez. La cantidad que el Govern abonará a Acciona este mes de agosto no ha trascendido, pero Isern sí adelantó que será significativa.
El alcalde también explicó que el Govern mantendrá reuniones con la vicepresidencia de Asuntos Económicos para establecer un calendario de pagos a la empresa constructora. El presidente de Acciona Infraestructuras puntualizó que «no han exigido un pago mínimo para iniciar las obras».
Ritmo de la obra
Respecto al ritmo de ejecución de la obra, Isern señaló que será «rápida y ajustada a la disponibilidad económica». En términos similares se expresó Martínez. «Vamos a acomodar el ritmo de la obra a la disponibilidad financiera», espetó. Además, aunque no pudo concretar si se producirán retrasos respecto al calendario previsto inicialmente (terminar el proyecto en el primer trimestre de 2012), sí adelantó que «es posible que los retrasos sean mínimos».
Otras de las aclaraciones que efectuaron fue que las obras se reanudarán a principios del mes de septiembre porque la complejidad de la misma requiere tiempo para arrancar. «Toda reactivación de actividades requiere un plan», apostilló Martínez.
Tanto el alcalde de Palma como el presidente de Acciona Infraestructuras valoraron positivamente la reunión que mantuvieron ambas partes. Isern, que la calificó de «muy positiva», adelantó que habrá más encuentros entre ambas partes. Por su parte, Martínez destacó la «cordialidad y claridad» de planteamientos de los nuevos gobernantes de Cort y el Govern.
Como se recordará, Acciona paralizó las obras del Palacio de Congresos el pasado 10 de junio, ya que el Govern de Antich no le pagó los 20 millones de euros procedentes de los fondos estatutarios, que sí había ingresado el Gobierno central.