Román Sanahuja Escofet, propietario de la inmobiliaria Sacresa, adjudicataria del concurso de Can Domenge, negó ante la juez y el fiscal que su familia hubiese sobornado a políticos de Balears para adquirir el solar palmesano por 30 millones de euros.
«Nadie del Consell (de Mallorca) subió a mi yate ('Cap de Quers'), ni navegué con bolsas llenas de dinero», afirmó Sanahuja en calidad de imputado en la pieza secreta que durante cuatro meses se investigó en el marco del 'caso Can Domenge'.
Acusación
La acusación principal la sostiene el excapitán del barco de la familia Sanahuja, José Manuel Baldor, quien declaró que Román Sanahuja entregó las bolsas con dinero a «un político bajito del PP o de UM» a su llegada a Marina Port de Mallorca tras una travesía desde Barcelona.
Según el hijo mayor de Román Sanahuja Pons, a bordo del 'Cap de Quers' ha realizado numerosos viajes a la capital balear, pero «nunca» con grandes sumas de dinero en efectivo, como afirma Baldor.
«Ese capitán tenía problemas psicológicos, al parecer, por la separación de su mujer. Tuvo problemas con la tripulación. Dejó de trabajar para nosotros en mitad de un viaje por Cerdeña de una manera traumática para toda nuestra familia», explicó Sanahuja.
También, negó haber mantenido reuniones en un 'parking', donde supuestamente se realizó el reparto del dinero del presunto soborno.