La Vicepresidencia Económica del Govern presentará en un plazo de quince días un Plan de Saneamiento Financiero «viable y creíble» al Ministerio de Economía y Hacienda para poder «empezar a pagar a los proveedores» y cumplir los objetivos del déficit público, según ha anunciado la portavoz del PP en el Parlament, Mabel Cabrer, quien ha criticado que al anterior Ejecutivo le «rechazaron» su Plan de Saneamiento, a pesar de que era del mismo color político que el Gobierno central.
En una comparecencia ante los medios, Cabrer ha considerado que el anterior Plan de viabilidad económica y financiera para las islas sería «malo, porque no se cumplían las cifras marcadas en cuanto al déficit público», razón por la cual «se rechazó», de forma que ha remarcado que el que presente el actual Govern de José Ramón Bauzá pasará por «continuar con una política de austeridad radical y de reducción» de altos cargos y Consellerias, ya que «no nos queda otro remedio».
«El rechazo del anterior Plan implicó que no teníamos Fondos de Competitividad y ahora resulta que las entidades financieras no nos dan los 150 millones de euros del crédito a corto plazo para pagar a los proveedores, por lo que se trata de una cadena de despropósitos que se debe resolver de manera inmediata», ha aseverado la portavoz 'popular' en la Cámara autonómica.
Así, ha indicado que el hecho de que el Parlament sólo tenga dinero para pagar la nómina de julio es una «situación más de las que nos estamos encontrando» y, en este sentido, ha incidido en que la situación económica y financiera de Baleares es «muy delicada y no nos la hemos inventado, sino que nos han dicho que había unas cosas hechas que no lo estaban».
De este modo, ha acusado al anterior Ejecutivo de haber «engañado a los ciudadanos» al anunciarles, por un lado, que llegarían 240 millones de euros del fondo de competitividad a través del nuevo sistema de financiación autonómica y, por otro, que «se dejaría 150 millones de euros al nuevo Govern para créditos a corto plazo, algo que ha resultado ser falso».
Ante tal situación, Cabrer ha informado de que el PP ha presentado dos Proposiciones No de Ley, de forma que la primera se refiere a la situación económica de Baleares y, a través de ellas, se pretende que el Parlament constate la «necesidad de elaborar un Plan de Saneamiento Financiero viable y creíble», al tiempo que se insta al Govern a negociar con las entidades financieras los créditos necesarios para hacer frente al pago de proveedores.
Mientras, la segunda se refiere a la política de austeridad del Govern y, mediante ella, los 'populares' buscan que el Parlament manifieste su apoyo y su satisfacción por la reducción de Consellerias y Direcciones Generales por parte del nuevo Govern al que instan a que continúe con las políticas de austeridad y reducción del gasto público.
Ahorro de 42 millones de euros
En esta línea, la portavoz del PP en el Parlament ha recalcado que la reducción de departamentos y altos cargos en las distintas instituciones de las islas supondrá un ahorro de 42 millones de euros en cuatro años, de los que 26,6 millones corresponderán al Govern, 7 millones al Ayuntamiento de Palma y 6 millones al Consell de Mallorca.
«Es rotundamente falso la acusación del PSIB sobre la subida de sueldos, ya que hablamos de un ahorro que este partido no hizo», ha censurado, al tiempo que ha estimado que los socialistas deberían hacer «más autocrítica», teniendo en cuenta que «tenemos un problema económico interno grave».
Por otra parte, ha manifestado que no ha visto la reducción de 300 millones de euros en la anterior legislatura, sino más bien al contrario, ya que, según ha criticado, «el endeudamiento se duplicó en cuatro años y si no fuese por esta deuda tan grave, hoy estaríamos en una situación financiera mejor».
De esta manera, ha tachado de «totalmente errática» la política de la anterior legislatura, ya que «la única reducción que se hizo fue cuando salió UM del Govern y no cuando lo necesitaba la administración».
Preguntada por el hecho de que la Mesa del Parlament haya acordado la adquisición de un iPad para los 59 diputados del Parlament, Cabrer ha recordado que se trata de una compra realizada ya en la anterior legislatura, si bien ha estimado que «no es momento de que nadie tenga privilegios de ningún tipo».
No obstante, ha indicado que el coste ha sido «mucho menor», dado que «se ha aprovechado un sistema de compras de la Administración del Estado». «Son cosas que no quedan bien de cara a la ciudadanía, aunque en el Parlament ya se ha hecho una reducción de personal eventual y de asignaciones a grupos de un 25 por ciento y también se han tomado muchas decisiones de cara a eliminar los gastos en regalos, cenas y flores».