La Fiscalía Anticorrupción y el Grupo de Delincuencia Económica de la Policía Nacional están analizando a fondo las declaraciones de los imputados en la 'operación Poseidón', un fleco del 'caso Mar Blau', y el contenido de la documentación incautada en los registros realizados en Palma y Barcelona, con el objetivo de remitir al juez las primeras conclusiones de la causa que se investiga bajo secreto sumarial.
El último encausado en la 'operación Poseidón', el exconseller de Treball en el Govern de Jaume Matas, y exdirector general de Ports del Govern, el menorquín Cristòfol Huguet, negó la imputación de haber incurrido en sobornos al encargar a una empresa de Barcelona un estudio para la ampliación del Port de Ciutadella.
La acusación proviene de uno de los detenidos en la capital catalana, según confirmaron a este diario fuentes judiciales, que fue al autor del mencionado informe. La ampliación del Port de Ciutadella salió a concurso y lo ejecutó otra empresa.
Por ello, fiscales y policía investigan si el imputado que incrimina a Huguet, uno de los pocos consellers del Govern de Matas que no ha estado inmerso en casos judiciales, actúa por venganza.
En la 'operación Poseidón' también están imputados el exdirector de la Autoritat Portuària Àngel Matías y el ingeniero J.L, quienes quedaron en libertad con cargos el pasado miércoles. La causa está bajo secreto, al igual que una de las piezas secretas del 'caso Mar Blau' relacionada con pagos en negro a proveedores.
Los delitos investigados son malvesación, fraude y cohecho.