Los ayuntamientos de Mallorca deben a Tirme 67.290.197 euros por el tratamiento de residuos sólidos urbanos. De ellos, 52.244.958 euros corresponden a deuda vencida, es decir, que los consistorios ya están fuera del plazo de pago; los 15.046.138 restantes no han vencido (ver gráfico).
Por ayuntamientos, el de Palma es el que adeuda a Tirme un importe más elevado; exactamente 23.648.012 euros, de los que ya han vencido 17.068.661 euros. A esta cantidad hay que restar 4.640.000 euros, cuantía pendiente de compensar por los terrenos de Son Reus que Tirme tiene alquilados a Cort.
La situación financiera de Tirme es delicada, hasta tal punto que los representantes de UGT en la empresa se han puesto en contacto con su secretario general, Lorenzo Bravo, para que medie ante los ayuntamientos. UGT teme que Tirme se vea obligada a reducir personal por culpa de la deuda de los ayuntamientos. En concreto, Tirme cuenta con más de 350 empleados directos y más de 200 indirectos. El sindicato explica a su secretario general, Lorenzo Bravo, que los ayuntamientos hacen una mala gestión con la tasa de residuos sólidos urbanos, ya que al tratarse de una tasa los consistorios no pueden utilizarla para otras cuestiones sino que tienen que destinarla directamente al fin para el que son recaudadas.