El Parlament cerró ayer la legislatura más convulsa de la historia de Balears con la aprobación de la ley del buen gobierno pero con el «no» a la ley de igualdad que promovía el Govern. La última sesión parlamentaria resultó agridulce para el Ejecutivo de Antich. Por una parte, el Govern pudo sacar adelante la ley del gobierno gracias al apoyo del grupo mixto y a la abstención del PP. Sin embargo, la ley de igualdad, otra prioridad para el gabinete de Antich, no puso salir adelante en el último pleno. El PP votó en contra y CxI se abstuvo. De esta manera, la ley de igualdad no prosperaba. Al acabar el pleno, el president del Govern, Francesc Antich, arremetió contra el PP por haber votado en contra de la ley de igualdad. Durante toda la mañana, Antich y sus socios estaban convencidos de que los populares se abstendrían.
«Yo creo que no creen en la igualdad porque para ellos no es ningún tipo de prioridad como no lo ha sido cuando han gobernado hacer guarderías o residencias y llevar a la práctica esa igualdad poniendo instrumentos», criticó Antich.
Para la consellera de Benestar Social, Josefina Santiago, la actitud del PP «es una vergüenza». Santiago criticó a la diputada popular Isabel Llinás por haber estado negociando el contenido de la ley «durante ocho meses hasta hoy -ayer para el lector- a mediodía» y la acusó de cambiar de opinión «en veinte minutos». Santiago aseguró que si la próxima legislatura hay un gobierno progresista, la ley de igualdad será la primera que llegue al Parlament.
Sin embargo, el PP se defendió ante los ataques de Antich. El portavoz del PP en el Parlament, Antoni Pastor, justificó el rechazo a la ley de igualdad entre hombres y mujeres de Baleares a la «aritmética parlamentaria» y recordó que tras la expulsión de UM el Govern se encuentra en minoría. «Quienes gobiernan son ellos, han querido continuar gobernando a cualquier precio y eso, en democracia, se paga de esta manera», subrayó.
La mala noticia fue el rechazo a la ley de igualdad, pero al menos el Govern consiguió sacar adelante la ley del buen gobierno, otra prioridad para Antich.
Corrupción
La socialista Rosamaría Alberdi argumentó que tras los escándalos de corrupción se tiene que «volver a recuperar la confianza a través de la transparencia y una mayor eficacia en la gestión pública». En el último pleno también se aprobaron las conclusiones de la comisión de investigación de Son Rossinyol, donde se cuestiona la actuación del Govern.
La jornada parlamentaria arrancó con la aprobación de la modificación de la Ley de Cooperativas Agrarias de Balear. A partir de ahora, el capital social mínimo para constituir este tipo de sociedades en las islas será a partir de ahora de 1.803 euros. Al concluir el pleno, Aina Rado pidió seny ante la nueva etapa política que empieza en Balears.