«Por primera vez el mundo árabe, a través de la sociedad civil y los jóvenes, está entrando, con medios políticos totalmente nuevos, en la modernidad universal. Es un acontecimento importantísimo porque es la tercera fase de un proceso que empezó en los años 80 con la democratización de muchos países de Sudamérica y en los años 90 con los cambios en los países del Este». Así de rotundo se manifestó ayer Sami Naïr (Argelia, 1946), pensador y ex diputado del Parlamento Europeo, y gran conocedor del mundo árabe, que ayer pronunció una conferencia en el Parlament.
El pensador considera que la caída del régimen de Mubarak en Egipto es clave en los cambios que se están produciendo en cadena en el mundo árabe. «Egipto es el corazón del mundo árabe, con una situación geográfica decisiva, y con un peso cultural, cientifico y humano muy importante. Cuando Egipto va bien, el mundo árabe va bien. Cuando Egipto va mal, el mundo árabe va mal», comentó Sami Naïr en un encuentro con medios de comunicación antes de su conferencia.
«Ahora se inicia una historia nueva en el mundo árabe y se ha producido un efecto dominó. El régimen de Gadafi -advirtió Sami Naïr- es un régimen especial. Hitler era un loco, pero Gadafi es un personaje que está enfermo psicológicamente, un megalómano narcisista, que vive de la perversión y ha destrozado el Estado libio», dijo Naïr, que criticó el papel de Europa en los conflictos del mundo árabe.