El Grupo Marxant, vinculado al empresario Jacinto Farrús, pagaba las fianzas a otras sociedades para que se presentaran a los concursos convocados por el Inestur, según declaró ayer en calidad de testigo la ex contable de esa empresa C.S.P. ante la jueza instructora del 'caso Voltor', Carmen Abrines, y el fiscal anticorrupción Miguel Subirán.
Según el Ministerio Público esa estrategia iba dirigida a dar una apariencia de concurrencia al concurso y simular de este modo que no sólo sociedades de Farrús optaban a este proceso.
Las fianzas, de entre 1.700 y 2.000 euros cada una, «se ponían por orden de (Guillermo) Bongiovanni» (administrador de Torum Consulting), dijo la testigo.
Ingresos
Bongiovanni «sacaba el dinero, me lo daba en efectivo y yo procedía al ingreso del mismo», añadió. No obstante, ignora, según apuntó, que Farrús tuviera conocimiento de estas prácticas, si bien «siempre me dio la sensación de que recibía órdenes de mis superiores y éstos de Farrús», subrayó. La testigo, asimismo, declaró que en febrero de 2008 Bongiovanni, imputado en la causa, le pidió que hiciera un cheque al portador por 7.000 euros, cuestión que a ella le extrañó porque no lo podía justificar en las cuentas de la empresa.
La ex contable, también, declaró que una mujer fue contratada en el Grupo Marxant tras pedir trabajo al ex responsable económico del Inestur, Alvaro Llompart, a quien conoció «en una fiesta», lo que supuso, a juicio de la testigo, una compensación por la concesión a Torun del concurso Arte y Cultura.