El teniente de alcaldesa de Palma Eberhard Grosske ha reclamado hoy el cese de Malén Tortella como gerente y presidenta en funciones de la empresa municipal Emaya por su imputación en el «caso Maquillaje», puesto que su permanencia en esos cargo es una «anomalía que no beneficia a nadie».
Grosske ha indicado a EFE que la declaración esta mañana de Tortella ante el juez instructor de este caso de presunta contratación irregular de personas vinculadas a Unió Mallorquina (UM) hace más acuciante la necesidad de que dimita o sea destituida para que la Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillado (Emaya) recupere la normalidad institucional.
El portavoz municipal del Bloc ha recordado que, tras la salida de UM del equipo de gobierno municipal, Emaya es el único organismo municipal donde este partido conserva puestos de responsabilidad por el respaldo del PP a la negativa de los nacionalistas de dejar la gerencia de la empresa.
«Malén Tortella debe dimitir como gerente y presidenta interina», ha recalcado Grosske, para quien la imputada tendría que ser reemplazada en la presidencia de Emaya por el responsable municipal de Hacienda, Función Pública, Innovación e Interior, Andreu Alcover, puesto que la presidencia de las empresas públicas siempre la ha ocupado el titular del área de gobierno correspondiente.
No obstante, el segundo teniente de alcaldesa se ha mostrado dispuesto a «llegar a algún tipo de acuerdo» con los grupos de la oposición para designar para ese cargo a una persona «sin sombra de dudas» sobre la que exista consenso.
En este sentido, Grosske ha hecho un llamamiento a la «responsabilidad» de PP y UM y se ha mostrado contrario a promover un cambio que no responda a una voluntad real de estabilizar la situación institucional de Emaya por lo que resta de legislatura.
«Todo lo demás es perjudicar a los ciudadanos, que ya han padecido bastante en esta legislatura» con la sucesión de escándalos de corrupción protagonizados por antiguos gestores de instituciones públicas.