Dos controladores del Aeropuerto de Palma acudieron la semana pasada en calidad de testigos a declarar ante la Guardia Civil por el caos aéreo originado el pasado 3 y 4 de diciembre, mientras que otro controlador será interrogado mañana y un cuarto lo hará el próximo viernes, 31 de diciembre.
Así lo han informado a Europa Press fuentes de los controladores aéreos de Balears, que han detallado que, de momento, la Fiscalía de Balears no ha imputado por el delito de sedición a ninguno de los 200 controladores de las islas, de los cuales 150 trabajan en Son Sant Joan, por lo que ninguno de ellos ha recibido un burofax en el que se les cite a declarar en calidad de imputados.
Por otro lado, han manifestado que sólo uno de los dos controladores aéreos que han acudido a las dependencias de la Guardia Civil aceptó declarar y contó lo que «vivió» el día 3.
Así, explicó que él fue uno de los 16 controladores aéreos que acudió ese día a trabajar en el Aeropuerto de Palma en el turno de 15.00 a 22.00 horas, por lo que negó que en algún momento se opusiera a realizar su labor.
Por su parte, el segundo controlador aéreo se negó a declarar ante la Benemérita alegando que la competencia para interrogarle corresponde a la jurisdicción militar con motivo del estado de alarma decretado por el Gobierno y la militarización del espacio aéreo ordenada por el Ejecutivo central.
Estas comparecencias se han producido días antes de que la Fiscalía de Madrid haya remitido este miércoles al Decanato de los Juzgados de Primera Instancia de Plaza de Castilla la denuncia contra 175 controladores aéreos por un presunto delito de sedición por el caos aéreo provocado el 3 y 4 de diciembre con la finalidad de que un juez les cite a declarar en el marco de unas diligencias penales.