Si hay una zona en Palma con atascos históricos ésta es la rotonda de acceso a la carretera de Sóller, un enclave donde cada día los conductores habituales y no habituales padecen constantes atascos. Y así desde hace décadas. Han pasado gobiernos de diferentes colores políticos, pero ninguno ha dado solución a este eje circulatorio tan conflictivo. Ahora, parece que se dará una solución definitiva con la construcción de una macrorrotonda y un paso elevado por donde circulará el tráfico de la vía conectora, segunda circunvalación de Palma.
Y es que se trata de una intersección donde confluyen flujos muy importantes de tráfico de los los polígonos de Son Castelló y Son Rosinyol, del Camí des Reis, de la carretera Palma-Sóller, así como de los barrios de la zona. No hay más que ver las cifras. Cada día entran y salen de esta rotonda 37.000 vehículos diarios del polígono más importante de Palma, otros 36.000 de Camí des Rei, 45.000 entran y salen de Palma y 22.000, de la carretera de Sóller.
Retenciones
Así las cosas, en horas punta, se han llegado a producir colas kilométricas de retenciones. «Yo he llegado a ver colas de hasta 2 y 3 kilómetros que llegaban hasta Son Sardina», explica un usuario habitual de la carretera de Sóller. Estas horas de más tráfico se registran, por la mañana, entre las 8 y las 9 horas, y por la tarde, a las 13 horas y entre las 17 y 18 horas.
La solución a este caos parece estar más cerca ahora con la redacción del proyecto de la vía conectora, que en breve ya comenzarán a adjudicarse proyectos. Esta vía supondrá la creación de una vía cuatro carriles que en este tramo en concreto transcurrirá paralelo a Camí des Reis y la construcción de una nueva rotonda en este enclave de tal forma que se distribuya mejor el tráfico. El director insular de Carreteres del Consell de Mallorca, Ernesto Santamaría, explica que se proyecta una gran rotonda con cinco accesos con bastante tráfico.
La rotonda, de 180 metros de diámetro, se construirá a nivel, pero por encima de la glorieta pasará la vía conectora con los cuatro carriles. «Es una rotonda de complejo funcionamiento», indica Santamaría, quien precisa que no está definida cómo será la estructura del paso elevado, si un puente o un terraplén, dependerá de condicionantes paisajísticos y económicos.
La nueva rotonda que desplazará su trazado, estará orientada más al norte y hacia la derecha, donde no hay viviendas y causará menos impacto, según especifica el director insular de Carreteres. Otra rotonda más pequeña al lado dará acceso a los polígonos de Son Castelló y Son Rossinyol. Al inicio de Son Castelló también se construirá una nueva rotonda en la intersección con Gremi Tintorers.
Tráficos
«Se resuelven los tráficos de paso locales e industriales, más el tráfico de tipo urbano, que en las horas punta es muy elevado y que la rotonda actual no es capaz de soportar. Cuanto más grande es una rotonda más tráfico puede soportar», dice Santamaría. Ahora se estudia también el acceso a Son Sardina.
El concejal de Mobilidad del Ajuntament de Palma, José Hila, indica que el proyecto, en el que Consell y Ajuntament han trabajado de forma coordinada, «es suficiente» para resolver el problema que plantea esta rotonda en concreto. «El hecho de que haya dos niveles, y que el tráfico de la vía conectora no se mezcle, da mayor fluidez al tráfico», indica Hila.
Para el Ajuntament, «mejorar los accesos a Palma, es absolutamente prioritario y ya que hay un convenio suscrito con Madrid con dinero suficiente, que se ejecute cuanto antes. En las entradas a Palma donde se forman importantes colas, se mejora considerablemente», asegura José Hila.