Un imputado en el «caso Maquillaje» ha afirmado ante el juez que cuando recibió la citación de la policía por esta causa le presionaron en Unió Mallorquina (UM) para que dijera que no trabajó para el partido en la campaña de 2007, cuando realmente sí lo hizo contratado por la productora Ambit Digital.
Hoy ha acabado la tanda de declaraciones de los quince imputados citados por el juez del caso, Juan Ignacio Lope Sola, y vinculados con una supuesta red de enchufados que trabajaron para UM mientras estaban contratados por productoras vinculadas al partido.
Estas productoras fueron Ambit Digital y Vídeo U, esta última supuestamente propiedad de Maria Antonia Munar y de Miquel Nadal cuando eran presidenta y vicepresidente del Consell de Mallorca en la legislatura pasada, época en la que la institución insular concedió a estas sociedades contratos y subvenciones millonarias.
Uno de los imputados, Juan Arrom, afiliado a UM desde 2006 hasta este año, ha asegurado que durante la campaña estuvo contratado por Ambit Digital cuando realmente trabajó en la sede de UM como auxiliar administrativo.
Ha relatado que cuando recibió la citación de la policía para declarar por este caso acudió a UM, donde le dijeron que «bajo ningún concepto» dijera que había trabajado para el partido, que se abstuviera de declarar en policía y que ellos le dirían lo que tenía que decir, así como que se «quitara a la abogada de encima».
En esta reunión estaban presentes, ha dicho, el secretario general de UM Joan Monjo, otra de las contratadas por Ambit Digital que trabajó para UM y el abogado del partido.