El sindicato UGT ha rendido hoy un homenaje a los 97 trabajadores -la mayoría mujeres y niñas- que fallecieron en 1895 en Palma, en el accidente laboral del polvorín de Sant Ferran, el más grave de la historia de Balears.
Con una ofrenda floral, un año más, el sindicato ha acudido al cementerio de Palma para recordar a las víctimas, a sus familias y defender que esta tragedia no caiga en el olvido, sobre todo en tiempos de crisis en los que los recortes laborales marcan la tónica y ponen en peligro los avances en prevención laboral alcanzados.
«No nos podemos permitir el lujo de que una negligencia empresarial como la que sucedió en el año 1895 en Palma vuelva a pasar», han remarcado los responsables de UGT, según recoge un comunicado emitido por el sindicato.
El accidente laboral del polvorín de Sant Ferran, ubicado cerca del edificio de Hacienda de la calle Cecili Metel de Palma, tuvo lugar cuando cerca de un centenar de trabajadores se encontraban recuperando pólvora y otros materiales obsoletos que habían servido de munición del Ejército españoles, recuerda UGT en su nota.
Entonces, las medidas de prevención «eran prácticamente inexistentes» y la detonación desencadenó la tragedia que, a juicio del sindicato, «probablemente» no hubiera ocurrido si se hubieran aplicado las medidas de prevención de aquella época.
UGT insiste en que el pasado no se debe olvidar para evitar que vuelvan a repetirse hechos como éste en el siglo XXI, sobre todo ante la actual crisis «porque algunos empresarios todavía tienen el objetivo de reducir al máximo los costes de producción para sacar la máxima rentabilidad sin pensar en la seguridad de los trabajadores».