El Centre de Recerca Económica (CRE) ha augurado este jueves que la economía balear cerrará el año con un decrecimiento de entre el -0,8 y el -0,9 por ciento, a pesar de que durante el tercer trimestre de 2010 se ha atenuado el ritmo del descenso hasta un -0,4 por ciento.
El director del CRE, Antoni Riera, ha remarcado que pese a que durante el tercer trimestre la cifra todavía sea negativa (-0,4%) la comunidad ha conseguido «recuperar un punto porcentual» en sólo tres meses, «cuando antes tardábamos nueve meses».
No obstante, ha lamentado que la comunidad aún no sea capaz de salir de la «franja roja» de la economía debido, tanto a que determinados sectores -como la industria o la construcción- han «actuado de contrapeso», como a que la contribución del turismo no es suficiente puesto que «no basta un balance sólo basado en la cantidad».
En este sentido, ha abogado por aplicar una estrategia turística diferente en las islas que consiga hacer frente a «una competencia cada vez más cualificada y competidora». Riera ha señalado que actualmente no se «garantiza la continuidad del turismo como motor de crecimiento regional», por lo que ha advertido que la política turística de la comunidad «no puede ser sólo de promoción».
El director del CRE, quien ha eludido hacer previsiones de la economía del próximo año, ha considerado que «difícilmente», si no se arreglan las causas que provocan la escasa actividad económica, habrá capacidad de generar ocupación, «con independencia de la tasa de crecimiento», coincidiendo con lo expresado este martes por el conseller de Economía y Hacienda, Carles Manera, quien vio «difícil» que se crease ocupación en 2011.