Gabriel Garcias, abogado de la ex presidenta del Parlament balear Maria Antonia Munar, ha opinado hoy que las pruebas contra su defendida en el «caso Can Domenge» de supuesta corrupción en la venta de un solar son «débiles».
Así lo ha dicho hoy a Efe después de que ayer se supiera que la Fiscalía mantendrá la acusación contra Munar en este caso, que investiga un presunto cobro de comisiones en el pasado mandato por miembros de UM gracias a la venta por el Consell del terreno palmesano de Can Domenge, que se adjudicó por la mitad de lo ofertado por el Grupo Núñez y Navarro (30 frente a 60 millones), impulsor de la querella.
En los pasillos de los Juzgados de Palma, Garcias ha dicho no haberse sorprendido por la noticia sobre la ex presidenta del Consell de Mallorca y del partido Unió Mallorquina (UM).
«No me sorprende, porque si no nos sorprenderíamos cada día, es un caso igual que los demás pero con más presión mediática», ha apuntado el abogado, quien aún no ha recibido el escrito de la Fiscalía Anticorrupción en el que se pide a la jueza el final de la instrucción y se detalla la lista de acusados.
En cuando al fundamento de la acusación contra Munar, ha indicado que, a su juicio, no hay suficientes pruebas contra ella, cuya situación procesal ha admitido que se complica.
«A toda persona que la acusan más de una vez se le complica», ha sostenido en referencia a sus otras imputaciones en dos piezas de otro caso de corrupción, «Maquillaje».
Munar afirmó en el pasado mes de julio ante la jueza del «caso Can Domenge» que ella no cobró ninguna comisión por la adjudicación del solar, y añadió que no le constaba que «nadie» lo haya hecho.
La ex presidenta del Consell -imputada por fraude, tráfico de influencias e información privilegiada- defendió el expediente de adjudicación del solar y aseguró que estaba «convencida» de que se tramitó correctamente.