El conseller d'Hisenda, Carles Manera, confirmó ayer algo que ya se daba por seguro desde hace varios días: la prórroga de los presupuestos de este año ante la falta de mayoría para aprobar un proyecto que le habría permitido obtener 60 millones por ingresos en impuestos que la oposición no ha querido avalar.
Manera hizo este anuncio tras la reunión del Consell de Govern pero se esforzó en dejar claro que la prórroga no afectará a la ciudadanía ni a las inversiones ya previstas. La prórroga no impide que las cuentas públicas sufran un descenso del 5,6% en aplicación de las medidas para contener el déficit y de los ajustes aprobados en el gasto corriente y sueldos. El conseller, sin embargo, enmarcó la prórroga es un contexto en el que, dijo, «la situación económica repunta».
Puerta abierta
Manera admitió que, políticamente, la prórroga es la constatación de que no tienen mayoría suficiente en el Parlament pero quitó hierro al asunto y no descarto que, el próximo año, pudiera llegar a un acuerdo con UM para aprobar las nuevas cuentas. Manera se refirió a UM como «nuestro socio natural» pese a estar fuera del Govern desde el pasado mes de febrero.
La cuantía global del presupuesto se estima que será de unos 3.200 millones de euros.
Según el conseller, la prórroga de los presupuestos, que entrará en vigor el 1 de enero, garantiza la continuidad de las políticas sociales y de educación, salud y servicios sociales, y supone mantener el esfuerzo inversor de 440 millones de euros por parte del Govern, que sumados a la inversión prevista por el Gobierno central alcanzará los 896 millones de euros el año próximo.