La Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillado de Palma (Emaya) ha empezado las obras para instalar una conducción de aguas residuales de 295 metros de longitud en el tramo de la avenida Gabriel Roca comprendido entre las calles Antoni Maura y s'Escollera, que obligará a restringir dos meses el tráfico.
Hoy se ha eliminado el carril más próximo a la mediana en ambos sentidos, entre Antoni Maura y l'Escollera, para poder quitar la zona ajardinada y convertirla de forma provisional, mientras duren las obras, en zona de uso para el tráfico, según ha informado Emaya en un comunicado.
Se prevé que ese tramo central se asfalte a principios de la semana que viene, cuando se empezará a actuar en el lado derecho de la avenida, en dirección a Llucmajor, donde se emplazará el nuevo colector.
La obra se prolongará dos meses y consiste en la construcción de un colector de alcantarillado de 295 metros de longitud y 1,2 de diámetro, más moderno que el actual que conectará con la estación de impulsión de aguas residuales de Duanes.
También se instalarán diez pozos negros de registro para optimizar el servicio de alcantarillado de la zona.
La actuación forma parte del plan de renovación del alcantarillado y dotación de nuevos colectores en los puntos más sensibles de la ciudad como Via Roma, Santa Catalina, Portopí o El Portitxol.