Trabajadores de empresas insolventes de Balears, en concursos voluntarios o necesarios de acreedores, las antiguas suspensiones de pagos y quiebras, han percibido del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) hasta julio 9,54 millones de euros, de un total que superará los 20 millones al acabar el año, según las previsiones de ese organismo estatal. En 2009, el Fogasa abonó en las Islas unos 32 millones de euros, ejercicio que coincidió con el repunte de la crisis.
Las prestaciones abonadas en las Islas ya superan el 10% de las cantidades totales pagadas por el Fogasa en todo el Estado hasta el pasado mes de julio, que ascienden a 779,6 millones de euros.
Esas prestaciones por insolvencia incluyen el importe de las indemnizaciones y salarios pendientes de pagos motivados por declaración de insolvencia en los Juzgados de lo Social, suspensión de pagos, quiebra, concurso de acreedores y fuerza mayor, así como los salarios de tramitación acordados por la jurisdicción competente.
Balears, que cuenta con dos juzgados que tramitan expedientes de concursos de acreedores, se sitúa por delante de Extremadura, La Rioja, Ceuta y Melilla en la percepción de fondos del Fogasa. Los juzgados de lo Mercantil de Palma mantienen una gran actividad debido al goteo de empresas que acuden a esa instancia por la crisis económica, sobre todo, del sector de la construcción, una de las más castigadas por la recesión junto a las del sector aéreo.
Prestaciones
El Fogasa recuerda que las prestaciones por regulación recogen, únicamente, las indemnizaciones correspondientes al 40% de la indemnización legal que corresponde a los trabajadores de empresas de menos de 25 trabajadores en los casos de despido colectivo y despido por causas objetivas derivadas de la necesidad de amortizar puestos de trabajo.
El incremento de las cifras de desempleo en Balears, que será más acuciante el próximo invierno, en el inicio de la temporada baja, también influye en el aumento de las cantidades de dinero que aportará el Fogasa en concepto de indemnizaciones o insolvencias.
El Fogasa abona a los trabajadores los salarios con sus pagas extraordinarias, incluidos los salarios de tramitación que se encuentran pendientes de pago por declaración de insolvencia, suspensión de pagos, quiebra o concurso de acreedores.
La cantidad máxima que abona el organismo estatal a la plantilla es el resultado de multiplicar el doble del salario mínimo interporfesional diario, sin incluir el prorrateo de pagas extras, por el número de días pendientes de pago con un máximo de 120 días, según las fuentes consultadas por este diario.
Los numerosos expedientes de empresas insolventes que se están tramitando en los dos juzgados de lo Mercantil de Balears repercutirán de manera inmediata en el aumento de las cantidades de dinero que debe aportar el Fogasa en concepto de indemnizaciones. Por ello, las previsiones apuntan a que Balears pueda batir en los próximos meses todos sus registros en la percepción de prestaciones del Fogasa.