El PSM ha considerado que el presidente de UM, Josep Melià, ha «desprestigiado la política» afirmando que todos los partidos han llevado a cabo prácticas clientelares y le ha instado a que «depure responsabilidades» en el seno de su formación «sin escurrir el bulto» y llevando a cabo una verdadera regeneración.
En declaraciones a Europa Press, el secretario general del PSM en Palma, Antoni Verger, ha remarcado que no todos los partidos «actúan igual» y ha recordado que, en su formación, no hay ningún cargo imputado ni ninguna persona que esté siendo investigada. Por ello, ha entendido que «no puede ser que la única salida de UM sea desprestigiar la política o intentar engañar a los ciudadanos».
Así, ha abogado por que el presidente de los 'uemitas' lleve a cabo una investigación dentro de su partido para «averiguar qué pasó» en relación a la presunta compra de votos en las elecciones de 2007 sin «intentar extender la sospecha a otros partidos».
Preguntado sobre si cree que Melià tendría que expulsar del partido al ex director insular de Relaciones Institucionales en el Consell de Mallorca, Josep Lliteres, sobre quien un miembro de la casa Argentina, Eduardo Corvalán, apuntó hacia él como la «cabeza» de la presunta trama de compra de votos, Verger ha remarcado que tendría que «averiguar qué pasó» porque se trata de un asunto «gravísimo» sobre el que UM debería adoptar las «medidas correspondientes» porque «parece ser que hubo conductas y prácticas bastante irregulares».
Verger cree que tendría que llevarse a cabo una «investigación exhaustiva» en UM y «apartar» a toda la «gente que esté afectada por corruptelas». Según él, Melià debería «mirar hacia dentro», adoptar las medidas correspondientes para «avanzar hacia la regeneración».
Esta regeneración en UM no será efectiva, ha señalado, «si lo único que hace es decir que todos los partidos lo hacen». Así, en referencia al proceso experimentado por la formación dirigida por Melià desde su congreso de refundación, Verger ha entendido que no se están dando los «pasos» necesarios en este sentido puesto que la «forma de regenerar un partido no es intentar engañar a la ciudadanía».