El viernes 2 de julio comenzaron las reuniones oficiales para «agilizar el proceso de transferencia» de las competencias de Agricultura y Pesca desde el Govern al Consell de Mallorca.
La Administración autonómica pretende que el 1 de enero próximo haya culminado la operación, que implica el acomodo de más de 300 personas, la cesión de varios locales en toda la Isla y la dotación presupuestaria para el buen funcionamiento de lo que hasta hace un mes fue una Conselleria del Govern.
Reserva autonómica
Según Fernando Pozuelo, nombrado hace unas semanas director general de Coordinación y Traspasos de Agricultura y Pesca por el Govern, «el traspaso puede y debe hacerse en ese periodo, entre otras razones porque hay un buen trecho de camino andado ya que los contactos se iniciaron el año pasado cuando el president Antich anunció el final de la consellería».
Por su parte el conseller balear de Presidència, Albert Moragues, fue algo menos estricto en términos temporales al pronunciarse el viernes 2 de julio sobre el proceso de transferencias, a su vuelta del Consell de Govern en el que a su iniciativa se habían aprobado los primeros pasos para la completa aplicación del artículo 70 del Estatut.
Moragues se refirió, para el caso del Consell de Mallorca, a las transferencias concretas en materia de pesca, y en un sentido «de futuro» a que el Govern «se reservará en cuanto a la extinta Conselleria d'Agricultura i Pesca sólo funciones concretas que se refieren a relaciones con el Estado y con las instituciones europeas, y aún así contará siempre con la participación de los consejos insulares».
En ese sentido Moragues reconoció que el FOGAIBA, dependiente del Govern, seguirá siendo el organismo encargado del pago de las ayudas y subvenciones de la Unión Europea a los profesionales del sector.