El teniente de alcaldesa de Benestar Social, Eberhard Grosske, no votó ayer las cuentas de Emaya correspondientes al ejercicio de 2009, ya que no se siente responsable de la gestión de Cristina Cerdó (UM) pese a haber formado parte del mismo equipo de gobierno. «Las votaré más tranquilo cuando se haga una auditoría», declaró tras la Junta General de Emaya. Además, añadió que se había ausentado de la sala de plenos en el momento de la votación porque PP y UM lo habían provocado al decir que querían ver cómo Grosske votaba a favor de la gestión de Cerdó, expresidenta de Emaya y de UM Palma. «Me parece impresentable que un grupo municipal que como mínimo ha metido mano a dos empresas, la EMOP y EFM (en referencia al PP), y otro que está bajo sospecha (UM) me provoquen», manifestó Grosske. También dijo que no se siente responsable de la gestión de Emaya «para nada». En su opinión, no es lo mismo un gobierno en coalición, que uno monocolor y aseguró que la responsabilidad de la alcaldesa no es la misma sobre un regidor del PSOE que sobre uno del Bloc.
Responsabilidad
El portavoz del PP en Cort, Julio Martínez, se mostró muy crítico con la actuación de Grosske. «Ha demostrado que no sabe estar en el gobierno y que su sitio es la oposición. Nosotros no hemos votado en contra de las cuentas de las empresas públicas, sino que nos hemos abstenido por responsabilidad», apuntó Martínez. Además, recordó a Grosske que «no ganó las elecciones; siempre ha estado en el gobierno gracias a Munar». En su opinión, Grosske genera paro, los empresarios no crean empleo porque no confían en él».
El portavoz del UM en Cort, Llorenç Palmer, también criticó la actitud del portavoz del Bloc. «Grosske debe actuar como regidor y no como oposición. Calvo no puede permitir estos gestos». Para Palmer la alcaldesa «se equivocó expulsando a UM del equipo de gobierno, tendría que haber echado al Bloc». Por su parte, el portavoz del PSOE, José Hila, no quiso valorar la ausencia de Grosske.
En lo que se refiere a los resultados de las Juntas Generales, se aprobaron las cuentas de todas las empresas públicas. En el caso de la SMAP, la EFM, la Funeraria y la EMT con los votos a favor del PSOE y el Bloc y las abstenciones de PP y UM. Las cuentas de Emaya se aprobaron con los votos a favor de PSOE y UM, y la abstención del PP; el Bloc no votó.
SMAP. La Sociedad Municipal de Aparcamientos ha cerrado el ejercicio de 2009 con unas pérdidas de 1,6 millones de euros. El informe de intervención señala que la SMAP tenía prevista en 2009 la venta por unos 4,8 millones de euros del solar que actualmente ocupa el aparcamiento de Compte d'Empuries. Esto habría supuesto unos beneficios globales de 3.141.000 euros. «Esta desvinción es la más significativa a la hora de comparar la previsión del presupueto y el plan de viabilidad con la ejecución del mismo», según intervención.
EFM. La Empresa Funeraria Municipal terminó 2009 con unos beneficios de 325.000 euros, gracias al descenso de los gastos financieros, el aumento de las cifras de negocio y el recorte de los gastos en personal.
EMT. La Empresa Municipal de Transportes cerró el pasado ejercicio con un déficit de casi 4 millones de euros. Intervención insta a la EMT a elaborar un nuevo plan de viabilidad porque el actual no contempla algunas pérdidas de la empresa.
EMOP. La Empresa Municipal de Obras Públicas terminó 2009 con un beneficio de 1.366.000 euros. El PP criticó la poca actividad de la empresa y sugirió que se encargue de la reforma de Son Moix.
Emaya. La Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillado cerró el pasado ejercicio con un beneficio de 104.904 euros, gracias a unos ingresos extraordinarios procedentes del ayuntamiento de Marratxí y a las abundantes lluvias. Intervención recomiendo un mayor control de los gastos en personal.