El conseller de Educació i Cultura, Bartomeu Llinàs, recomendó a los padres de escolares que mañana únicamente dejen a sus hijos en los centros educativos que se sumen a la huelga de funcionarios convocada por UGT, CCOO y CSIF en el caso de que no los puedan «dejar en otro sitio», con el objetivo de evitar las «aglomeraciones» de alumnos.
En declaraciones a los periodistas, el responsable educativo remarcó que lo primero que deben hacer los padres es tener la información necesaria para saber si el centro escolar al que asisten sus hijos se suma a la huelga. En el caso de que sea así, recordó que su departamento ha establecido unos servicios mínimos para que la escuela o instituto permanezca abierto y los menores puedan permanecer ahí.
No obstante, destacó que, si los padres no tienen «dificultades», es «mejor que se queden con sus hijos» y evitar que la aglomeración de alumnos «no sea tan grande».
Equipo directivo
El pasado viernes la portavoz del Govern, Joana Barceló, ya garantizó que los padres podrán llevar a sus hijos a los colegios durante la huelga general en el sector público del próximo 8 de junio, a pesar de que los servicios mínimos aprobados sólo aseguran la presencia del equipo directivo en los centros de Educación Infantil y Primaria, por lo que los profesores no tendrán la obligación de acudir.
Tras la reunión del Consell de Govern, Barceló esperó que el derecho de los trabajadores a secundar esta huelga contra el recorte del salario de los trabajadores públicos en un 5 por ciento de media transcurra con la «máxima normalidad» y, por otro lado, destacó que los servicios mínimos aprobados son los mismos que se establecieron en la última huelga sectorial que se llevó a cabo en Baleares.
«Los servicios mínimos garantizan el derecho de huelga, pero también aseguran los derechos esenciales de los ciudadanos», recalcó Barceló, quien detalló que además de los servicios educativos, también quedan garantizada la atención sanitaria y los servicios sociales.