UGT criticó las medidas anunciadas ayer por el conseller de Turismo, Miquel Ferrer, en relación a la regularización de plazas hoteleras y a la reforma de la Ley General Turística, al entender que éstas únicamente tienen como objetivo «contentar» al sector hotelero «en perjuicio de los trabajadores» y del resto de la sociedad.
«El consenso perseguido durante dos legislaturas está a punto de romperse por el afán de nuestros políticos de contentar al sector», reprochó hoy el sindicato en un comunicado en el que afirmó, además, que «acogen sus sugerencias sin contar con los trabajadores».
Asimismo, en cuanto a la regularización de las plazas, destacó que si se aprobase una ampliación de dos años más «supondría una ruptura» con UGT ya que el sector ha tenido tiempo «más que suficiente» para regularizarlas.
El sindicato señaló que no existe el «consenso social suficiente» ni en lo referente a los condohoteles, ni en cuanto al cambio de uso. En este sentido, apuntó que «nada se dice del coste social» que representan estas medidas, «nadie habla de la degradación» que sufrirán las zonas turísticas, ni «dónde se invertirán los beneficios».
UGT destacó que compatibilizar la actividad turística con la residencial conllevaría una «pérdida directa e indirecta» de puestos de empleo a consecuencia de la degradación de las zonas turísticas. Por ello, el sindicato señaló que no tolerará la «ruptura de uno de los pilares de la política del Govern» como es la concertación social y exigió que toda actuación en materia turística «se acuerde en el marco del consenso».