Retirada del pasaporte, prohibición de abandonar el país y comparecencia regular en los juzgados.
Esas medidas cautelares solicitadas por el fiscal anticorrupción Juan Carrau y aceptadas, anoche, por el juez instructor del 'caso Maquillaje', Juan Ignacio Lope Sola, tuvieron una respuesta fulminante por parte del presidente de UM, Miquel Àngel Flaquer, que tras conocer el alcance de la decisión judicial presentó de inmediato su dimisión.
Flaquer, imputado en la causa que investiga supuestas irregularidades en la concesión de subvenciones por parte del Consell de Mallorca en la anterior legislatura a empresas del sector audiovisual, había declarado por la tarde durante unas dos horas ante el juez, el fiscal Juan Carrau y los abogados personados, entre ellos sus letrados Jaime Campaner y Eduardo Valdivia.
El hasta ayer líder de UM inició su declaración explicando los entresijos del contrato suscrito con Studio Media para la contratación de una radio, y dijo que tras «refrescar la memoria» y estudiado la documentación, había intervenido como conseller de Hisenda y Pressuspostos, «como en cualquier contratación», pero que «no sabía que no se cumpliesen las condiciones».
Preguntado sobre el contrato de Studio Media, con un informe de fiscalización que ponía de manifiesto su disconformidad, y que a pesar de ello hubo una propuesta aprobando el procedimiento, manifestó que él sólo firmaba la propuesta, que no tenía acceso a todo el procedimiento de contratación.
«Al firmar montañas de papel, no vi ese informe de disconformidad. Me he enterado ahora, era una temeridad y una barbaridad aprobarlo, pero no sé por qué, al firmar 20 ó 25 propuestas, firmé éste», señaló.
También se refirió a las subvenciones otorgadas por el Consell y dijo que le preocupaba «tener el dinero para darlas», y que no hacía «juicios de valor si ese dinero se invertía bien o no». Añadió que la conformación de facturas no dependía de su departamento y que era el centro gestor el encargado de averiguar si debía pagar o no. Dijo, con respecto al fraccionamiento de facturas a diversas empresas, que si en fiscalización hubieran visto que eso era así «lo hubieran parado».
Por la mañana, Bartomeu Vicens había explicado ante el juez del 'caso Maquillaje' su relación con las empresas investigadas en la causa y, en relación a Vídeo U, confirmó que nunca votó subvenciones favorables a esa sociedad porque «era miembro del Govern y no podía votar porque no era electo». También, insistió en que no se «enteró» de las subvenciones a Studio y que «ni sabía» quién es Vídeo U.
El ex diputado del Grupo Mixto, asimismo, explicó que cuando se creó Nova Singladura, no estaban presentes Maria Antònia Munar ni Maximiliá Morales, pero sí el ex conseller de Turisme Miquel Nadal y el empresario Juan Gea padre, ambos imputados en la causa. «Llevaba competencias de Territori y de Patrimoni. Bastante trabajo tenía como para preocuparme por la radio, la televisión o la tercera edad», resumió Vicens.
La esposa de Alfredo Conde, Elizabeth Diéguez que también compareció ante el juez se negó a declarar.