Sebastián Romaguera, imputado en el 'caso Bitel', la causa que investiga una supuesta trama de corrupción urdida por el anterior gerente Damià Vidal para lucrarse con fondos públicos, ha consignado en el juzgado 160.000 euros «al objeto de reparar la integridad del daño que se le pudo haber ocasionado a la entidad Bitel», según el escrito que ha presentado su abogado.
Romaguera insiste en que al consignar esa cantidad de dinero, con el que hará frente también a sus posibles responsabilidades civiles, no supone, en absoluto, el reconocimiento de responsabilidad penal alguna.
Añade que se reserva el derecho de repetición (el que legalmente corresponde a toda persona que ha efectuado el pago de una deuda a la que no estaba directamente obligado) contra Damià Vidal, «presunto causante y responsable de este desaguisado», subraya.
Romaguera era socio con Vidal en la sociedad Helix Infocom, cuyos únicos ingresos derivaron de los importes de las facturas que confeccionó y presentó el ex gerente, por un importe de 255.587 euros. De esa cantidad, según Romaguera, abogado de profesión, deben detraerse 35.253 euros del IVA y 60.577 del saldo en cuenta bloqueada en la Caixa Rural.
Insiste en que consigna los 160.000 euros pese a que en la querella presentada por el Ministerio Fiscal se detallan únicamente 10 facturas de la entidad Helix Infocom cuantificadas en la suma de 139.222 euros, y que no se descuenta la suma de 25.000 euros que el día 23 de noviembre de 2006 dispuso Damià Vidal, ni los 40.910 euros ingresados en Hacienda correspondiente al IBI. La juez del 'caso Bitel' ha dado traslado al Ministerio Fiscal para que califique, paso previo a la apertura de juicio oral, y el principal imputado es Damià Vidal, en libertad bajo fianza de 200.000 euros.