Más del 95% de los municipios de Mallorca han aumentado la demanda de ayuda para alimentación, a pesar de que un tercio de las poblaciones de la Isla ya han aumentado estas ayudas en un 25%, tal y como se desprende del análisis sobre la cobertura de la necesidad de alimentación de Mallorca dado a conocer por la Red para la Inclusión Social, EAPN- Illes Balears.
El estudio se presentó ayer, Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, instaurado por la Asamblea General de la ONU.
Rotaris
Los Rotaris de Mallorca lanzaron ayer una campaña de recogida de alimentos.
En la gran mayoría de supermercados y tiendas de alimentación unos 1.000 voluntarios pidieron un kilo de comida no perecedera.
El portavoz de los Rotaris, Armando Pomar, destacó que la campaña «ha sido un éxito» y mostró su agradecimiento a los mallorquines. «Sobre todo se ha recogido aceite, arroz, pasta y leche», dijo.
Algunas de las cadenas que colaboraron en la jornada de ayer fueron El Corte Inglés, Alcampo, Eroski, Lidl, Mercadona e Híper Centro. Estas empresas también aportarán los excedentes alimentarios de la semana al Banco de Alimentos.
El aumento más significativo de la pobreza en la Isla lo han experimentado municipios de más de 20.000 habitantes.
En cuanto al colectivo que demanda más ayuda social, es de las familias con menores a su cargo. Este grupo ha incrementado la demanda de ayuda en un 56% según datos facilitados por diferentes servicios sociales municipales de Mallorca entre julio y agosto de 2009.
En la actualidad, más de 2.000 personas son alimentadas gracias a las 91 organizaciones de ayuda social que existen en la Isla.
Pacto social
Marta Soler, presidenta de la Red para la Inclusión Social y miembro de Cruz Roja; Jordi López, vicepresidente de al citada red; y Margalida Riutort miembro de Cáritas, reclamaron ayer un pacto por la inclusión social «que es obligado concretar durante este periodo de crisis», dijeron.
A su vez, reclamaron un incremento presupuestario para ayudas sociales, que «actualmente se encuentra en una época de recortes, como los vinculados a la nueva Llei de Serveis Socials del Govern», apuntaron.
Bajo el lema 'Rebélate contra la pobreza. Más hechos y menos palabras', ayer a las 18.00 horas en la Plaça Major de Palma se celebró una concentración en la que se dio lectura al manifiesto contra la pobreza. Un desafío que, en la actual situación de crisis económica, adquiere más importancia que nunca, dijeron. Los convocantes, entre ellos UGT y la Aliança Balear contra la Pobresa, reclamaron a los políticos «evitar que el entorno económico nos obligue a dejar de lado los compromisos concretados en el año 2000 para combatir la pobreza extrema, el hambre, el analfabetismo y las enfermedades (...) en definitiva recordar a los políticos el compromiso de avanzar hacia un mundo mejor».