El Institut Mallorquí d'Afers Socials destinará un total de 500.000 euros a las 517 familias de acogida de la isla.
La medida está especialmente dirigida a las 307 encargadas de sus familiares directos, la mayoría, abuelos, quienes cobran «pensiones muy bajas», explicó la consellera insular de Joventut i Igualtat, Josefina Ramis.
Esta ayuda, recalcó Ramis, está destinada especialmente a las familias monoparentales, que representan cerca de un 10 por ciento del total.
Manutención
El IMAS ha adoptado esta decisión tras mantener una serie de reuniones con algunas familias que se encontraban en «condiciones verdaderamente precarias» optando por instaurar estas subvenciones de una forma «más reglamentaria».
Las ayudas oscilarán entre los 300 y los 3.000 euros, en función de las condiciones de cada unidad familiar como pueden ser, su nivel de renta u otras situaciones sociofamiliares. De esta manera, la subvención servirá de complemento a la que ya se concede mensualmente de entre 250 y 500 euros.
De esta manera, se podrán beneficiar de esta prestación económica las personas que actualmente tengan un niño o más en acogida o que durante el 2009 acogieran un mínimo de seis meses.
Asimismo, deberán reunir algún requisito como acreditar una renta igual o inferior a 1.500 euros, ser familias monoparentales o ser pensionista, entre otros.
El objetivo principal de estas ayudas, aseguró Ramis, es evitar que se produzcan retornos en los niños a consecuencia de la crisis económica
La vicepresidenta del IMAS también quiso hacer hincapié en que el número de familias de acogida no ha descendido pese a la actual crisis.
En este sentido, resaltó a la campaña realizada durante el pasado año para buscar familias de acogida de niños mayores de siete años o de grupos de hermanos que ha sido todo un éxito.