El presidente de Afedeco, Bartomeu Servera, indicó ayer que no descarta llegar a un cierre patronal en Palma «debido a las críticas que han suscitado en el pequeño y mediano comercio las últimas medidas del Ajuntament en materia de movilidad», de las cuales el nuevo carril bici de las Avingudes sería «la gota que ha colmado el vaso», a lo que habría que añadir «los perjuicios causados por las obras del Plan E en estos momentos de crisis».
Servera afirmó que «la indignación va creciendo», sobre todo en zonas próximas a las Avingudes, como Velázquez, Sant Miquel o l'Olivar, en donde vecinos y comerciantes se están planteando también posibles movilizaciones por el carril bici, y añadió que su patronal no se opone a que existan estos equipamientos viarios, «siempre que hayan sido debatidos y consensuados antes con los afectados».
Por su parte, el presidente de Pimeco, Bernat Coll, también se expresó en la misma línea crítica, si bien indicó que «aunque Pimeco no descarta nada, incluido un posible cierre patronal», éste sería «la última solución», al entender que podría ser «un elemento más de crispación en unos momentos ya de por sí muy crispados».
Por su parte, el presidente de la Federació d'Associacions de Veïns de Palma, Jordi Sastre, valoró ayer de forma positiva la política de movilidad del equipo de gobierno, sobre todo por lo que se refiere al transporte público, si bien señaló que algunas medidas, como el carril bici de las Avingudes, «deberían de haberse consensuado». La presidenta de la Fepae, Marisol Sarabia, dijo, en cambio, que sus asociaciones se han quejado y que hablan de «caos» viario en Palma.
Por su lado, el regidor de Mobilitat, el socialista Joaquín Rodríguez, dijo ayer que entendía las críticas, pero mostró su confianza en que una vez que sea inaugurado el carril bici de las Avingudes, dentro de unos diez días, la situación viaria se normalizará en breve.
Rodríguez también señaló que en las principales ciudades españolas los carriles bici «funcionan ya sin problemas».