PEP MATAS
Los responsables de la Jefatura del Cuerpo Nacional de Policía de Palma han abierto una investigación sobre el traslado, la mañana del pasado sábado, de los detenidos en la 'operación Espada', desde las dependencias policiales hasta los juzgados de Vía Alemanya.
En Seguridad Ciudadana, la brigada responsable de los traslados, existe un profundo malestar, mientras que los sindicatos policiales SUP y CEP entran en la polémica suscitada dando la razón al PP y entienden que «se vulneró el honor de los detenidos» y «hubo ensañamiento y humillación». La polémica se abre a raíz de que el equipo encargado de la conducción de los arrestados los esposó.
Extraoficialmente se asegura que el Fiscal Superior habría pedido que se tuviera 'un trato especial' con los detenidos, y que lo mismo habría hecho el delegado del Gobierno, en concreto que no se les colocaran los grilletes. Así, el jefe superior habría dado una orden directa en este sentido al comisario jefe de la Brigada de Seguridad Ciudadana, y éste a su vez lo habría comunicado de manera verbal al inspector, responsable director del equipo encargado de las conducciones, integrado además por un subinspector y dos agentes.
A todos ellos se les ha pedido que hagan un informe por escrito sobre lo ocurrido y el porqué se colocaron los grilletes. Desde un sindicato se ha comentado que el comisario asume toda la responsabilidad, y se añade que según las normativas internas «tanto desde la Secretaría de Estado para la Seguridad, como del director Adjunto Operativo la directriz es muy clara, y dice que hay que colocar los grilletes en todas las conducciones, dejando al libre albedrío la manera de hacerlo, o sea, por detrás, delante, mano izquierda o derecha.»