El Rey recibió ayer en el Palacio de Marivent al delegado del Gobierno en Balears, Ramon Socías, y a los máximos responsables de la Guardia Civil y la Policía Nacional en la zona, con quienes examinó el estado de la investigación sobre el atentado de ETA en Palmanova. Fuentes de la Casa del Rey han explicado que todos ellos han agradecido a don Juan Carlos su interés por los trabajos en marcha para localizar a los autores del asesinato de dos guardias civiles en Palmanova y por la situación de las Fuerzas de Seguridad en Balears.
Don Juan Carlos se reunió en Marivent con Socías, con el comandante jefe de la Guardia Civil de la zona de Balears, Basilio Sánchez Rufo, y con el comisario jefe superior de policía de las Islas, Bartolomé Campaner.
Por otra parte, a las diez de la mañana de ayer un conductor de la EMT de Palma que cubría una línea regular del servicio municipal de transportes se percató de que un pasajero había dejado abandonada una bolsa sobre uno de los asientos.
Acto seguido, el conductor, visiblemente nervioso, alertó a los servicios de emergencia de que podría ser un artefacto explosivo.
Rápidamente, agentes de las unidades de artificieros (TEDAX), de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía, con la colaboración de Autoridad Portuaria, acordonaron la zona y cortaron el tráfico, desde la rotonda de Portopí hasta el Dique del Oeste de Palma, provocando un atasco y una gran sensación de alarma y preocupación entre la población.
Tras realizar una exhaustiva revisión de la bolsa y comprobar que se trataba de una falsa alarma, se dio por finalizada la actuación de los artificieros.
En la citada bolsa había diferentes enseres personales, ropa diversa y algunos objetos diversos. Se trataba de un equipaje que, al parecer, había sido olvidado accidentalmente.