P. CANDIA/L. MOYÀ/P. MATAS
La Fiscalía Anticorrupción informó ayer al ex gerente de la Empresa Funeraria Municipal (EFM) de Palma Oscar Collado, detenido desde el pasado jueves en los calabozos de la Policía Nacional, que le imputa los delitos de apropiación indebida, malversación de caudales públicos y falsificación de documentos en el denominado 'caso Funeraria'. Además, en el transcurso del interrogatorio al que fue sometido Collado ayer durante más de tres horas, el Ministerio Público incrimina al principal imputado por lucrarse con la venta de tumbas y despilfarrar un millón de euros en ataúdes, entre otras cuestiones.
Según pudo saber ayer este diario, Anticorrupción maneja datos concretos sobre las supuestas actividades delictivas desarrolladas por Oscar Collado entre 2003 y 2007, es decir, cuando gobernaba el PP.
Según esos elementos indiciarios, el ex gerente de la EFM alteraba al alza, al parecer, el precio de las sepulturas y se quedaba con el «diferencial». Además, evitaba sacar a concurso las inversiones más importantes de la Funeraria, como cuando destinó un millón de euros a la adquisición de ataúdes, cantidad que habría despilfarrado según Anticorrupción.
Collado admitió una «deuda» con las arcas municipales, por su relación con el constructor J.P., imputado ayer, inferior a 20.000 euros y aseguró al fiscal Pedro Horrach que procederá a devolver esa cantidad «muy pronto». Dijo que, a pesar de contar con un sueldo mensual de 6.000 euros, tenía deudas y que por eso sacaba dinero de la caja pero que luego lo reponía.
El Ajuntament de Palma ya había detectado a principios de año facturas manipuladas de gastos, que se habían cobrado a la empresa municipal. Se trataba de tickets en los que se había añadido una cifra de más a mano y que correspondían a taxis o comidas, entre otras cuentas.
De esta manera, se hinchaban las cuentas que luego se facturaban a la Empresa Funerària Municipal, según le recordó el fiscal a Collado.
Sin embargo, fuentes consultadas por este periódico aseguraron que donde más irregularidades se han encontrado es en documentos y facturas relacionados con obras que debían ejecutarse y que, finalmente, no se ejecutaban, como el aparcamiento del cementerio de Sant Jordi. La reforma de Son Valentí también llamó la atención por un presupuesto que había crecido de forma desmesurada. Collado también fue interrogado por el cementerio musulmán de Palma, y dijo que esa obra no llegó a ejecutarse, que fue una inversión subvencionada e insistió en que el dinero está en poder del Ajuntament de Palma.
El ex gerente de la EFM pasará hoy a disposición judicial, según está previsto, y declarará ante el titular del Juzgado de Instrucción 11 de Palma, de guardia.
El portavoz del PP, Carlos Simarro, aseguró ayer que Collado «no pertenece al partido».