El Santuario de Lluc acogió ayer el séptimo encuentro de casas y centro regionales de Mallorca, en el que participó una veintena de entidades.
El conseller insular de Presidència, Cosme Bonet, y Ramón Torres, en representación del Govern, hicieron entrega de una placa a cada uno de los centros regionales que desarrollan su actividad en la Isla. Bonet agradeció la labor que desempeñan, de la que destacó «que sirven de puente entre culturas y facilitan la integración» y «su activa colaboración en el tejido asociativo» de Mallorca.
Por otra parte, el jefe de relaciones ciudadanas del Consell, Tolo Aguilar, explicó que desde la institución insular «hemos pedido a la Federación de Casas Regionales que modifique sus estatutos para permitir la incorporación de otras casas y centros que no están federadas». Los estatutos actuales contemplan que un único centro de cada comunidad autónoma forme parte de la Federación. De esta forma, ahora mismo la Federación deja al margen de su cobertura a media docena de casas y centros regionales que profesan la misma vocación que los reconocidos. El Consell pretende que todas las asociaciones de este tipo reconocidas tanto por la comunidad autónoma de origen como por las Illes Balears puedan formar parte de la Federación.
Actualmente, todas las comunidades autónomas del Estado, con la excepción de Canarias, tienen un centro regional en las Illes Balears. La jornada festiva comenzó con una misa en la Plaça del Acolliment y finalizó tras una multitudinaria comida. Más de 800 personas participaron en el encuentro.