La reforma que tiene previsto realizar el Ajuntament de Palma en la barriada del Camp Redó se está proyectando al margen de las exigencias del vigente Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el cual exige que se tramite como un Plan Especial de Reforma Interior (PERI).
Así lo entiende la oposición en Cort, cuya edil Lourdes Bosch destaca que «al no querer tramitar este proyecto como un PERI se está hurtando un derecho de los vecinos, que podrían presentar sus correspondientes alegaciones».
En opinión de Bosch «se está aplicando de manera errónea el Plan Urban para ejecutar la reforma del Camp Redó, esta figura está pensada para dotar de equipamientos, no para reformar los barrios».
Para la edil del Partido Popular «no se quiere hacer un PERI en el Camp Redó para ganar tiempo, pero lo que se está haciendo es impedir que los vecinos de la barriada puedan presentar sus alegaciones en una tramitación que puede que sea más larga, pero garantiza la protección de sus derechos». Sobre este aspecto, Lourdes Bosch pone especial énfasis en el hechos de que con el proyecto de un aparcamiento subterráneo en la zona «el Ajuntament obtendrá unos beneficios de un subsuelo que en la actualidad es propiedad de los vecinos».
El PGOU vigente califica como Area de Régimen Especial la comprendida entre las calles de General Riera, Cotlliure y Alfonso El Sabio, cuyas condiciones de reforma -restrcitivas urbanísticamente- figuras detalladas en el mismo PGOU.