Una de las principales líneas de investigación abierta en la 'operación Peaje', además del desvío de dinero público, es la posible existencia de facturas falsas en un supuesto entramado para justificar gastos, según las pesquisas que están llevando a cabo la Fiscalía Anticorrupción y el Grupo de Delincuencia Económica de la Policía Nacional.
También, los fiscales Juan Carrau y Pedro Horrach está comprobando la relación de los gastos, cerca de un millón de euros, realizado en cada una de las inauguraciones de los tramos de la carretera de Manacor, así como el coste de las casas que, supuestamente, se construyeron el jefe de obras de la vía F.O. y el vigilante, G.M., que daron en libertad provisional hasta que hoy constituyan sendas fianzas por valor de 125.000 y 75.000 euros, respectivamente.
El primer balance de lo supuestamente defraudado superaría los dos millones de euros, aunque esa cantidad podría aumentar a medida que se vayan analizando los soportes informáticos incautados en la 'operación Peaje'. Sólo el valor actual de los chalets de F.O. y G.M. superan los 600.000 euros.
La jornada de ayer en el juzgado de guardia de Vía Alemania fue maratoniana y comenzó a las 16.00 horas con la llegada a la sede judicial de Josep de Luis, abogado del vigilante de las obras de la carretera de Manacor, G.M. «A mí nadie me ha dicho nada. Supongo que mi cliente pasará hoy a disposición judicial», dijo el letrado.
Quince minutos más tarde llegaron los que hasta ayer eran los dos únicos detenidos en la «operación Peaje», F. O. Y G.M., a bordo de coches y furgonetas policiales, en medio de una gran expectación ante la presencia de familiares y medios de comunicación.
Pronto se sumaron los fiscales Anticorrupción Juan Carrau y Pedro Horrach , y el abogado que defiende a F.O. Gabriel Garcías. El juez que estaba de guardia, Enrique Morell, titular de Instrucción 9, llegó a las 17.30 horas.
Los abogados prefirieron aplazar el primer contacto con sus clientes en los calabozos hasta la llegada del juez. Primero fue interrogado F.O, y después G.M. El juez dio a conocer su auto cerca de las 21.15 horas. Uno de los momentos más emotivos se registró a la salida del segundo de los juzgados, ya que le esperaban su mujer, con la que se fundió en un prolongado abrazo, y varios familiares.