Los constructores ven «el final del pozo» como consecuencia de los crecimientos en la licitación de obra pública -básicamente de los gobiernos central y autonómico- y de la inversión empresarial derivada del Plan Renove Turismo del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, que se prevé se ejecutará en su mayor parte en la segunda mitad del ejercicio, por lo que confían en que la actividad del sector y los niveles de empleo se mantengan como mínimo en las Islas a lo largo de 2009, según afirmaron ayer el presidente y el director general de la Asociación de Constructores, Sebastià Pastor y Manuel Gómez, respectivamente.
El presidente de la patronal recordó que el Fondo Estatal de Inversión Local habilitado por el Gobierno prevé inversiones en las Islas por valor de 178 millones de euros a licitar antes del 31 de marzo y a ejecutar antes del 31 de diciembre, mientras que los empresarios turísticos de las Islas han solicitado financiación para invertir como mínimo otros 110 millones en el marco del Plan Renove Turismo, recursos a los que Pastor añadió los presupuestos «inversores» de la Comunitat Autónoma para el próximo año. «Esta inversión pública y turística permitirá contrarrestar la caída de la inversión privada residencial, que no se recuperará como mínimo hasta 2010», afirmó Pastor.
La Asociación de Constructores de Balears, que ayer celebró su asamblea general y cena anual en el complejo Riskal de Palma, presentó por la mañana el balance de actividad de sector en el ejercicio 2008, que arroja una caída de la inversión del 38'35 por ciento en el conjunto de las Islas, hasta 1.765 millones de euros.
Según detalló el director general de la patronal, Manuel Gómez, la inversión en viviendas y reformas con proyecto ascendió el año pasado a 890'5 millones de euros en las Islas, un 51'48 por ciento menos que en el año precedente. En cuanto a la licitación de obra pública, experimentó un descenso del 29'53 por ciento en el caso de los proyectos de edificación y del 1 por ciento en los de obra civil, con presupuestos de 257'7 y 262'2 millones, respectivamente.
De acuerdo con la información facilitada por la Asociación de Constructores de Balears, durante el año pasado las obras de modernización turística fue la única «familia» de la construcción que experimentó una evolución positiva, con un volumen de inversión de 64'8 millones de euros y un crecimiento del 31'12 por ciento respecto al ejercicio precedente.
En términos de empleo, los datos recopilados por la patronal de constructores indican que el número de trabajadores de alta en el Régimen General de la Seguridad Social descendió un 13'22 por ciento en 2008, con una media mensual de 45.583 empleados; mientras que el número de autónomos experimentó un crecimiento del 4'20 por ciento hasta alcanzar una media mensual de 17.561 trabajadores de alta.