Los agentes de la Policía Local de Palma no validan desde hace varios meses las denuncias de la ORA al considerar que no es su función. La iniciativa de un prestigioso bufete de abogados de presentar una denuncia ante el juzgado de guardia contra una «denuncia voluntaria de ORA», al considerar que el controlador que las impone no tiene la categoría de agente de la autoridad y que, por consiguiente se trata de la palabra de un ciudadano contra la de otro.
Esta noticia ha puesto al descubierto un hecho que se viene produciendo desde hace varios meses, pero que no había trascendido a la luz pública, según el letrado ponente, «para evitar una avalancha de recursos».
Por su parte, Angel García, portavoz de la Policía Local de Palma ha manifestado al respecto a Ultima Hora: «Es cierto que las denuncias que imponen los controladores de la ORA no están validadas desde hace varios meses por agentes de la Policía Local, al considerar que por cuestiones operativas los policías tienen otras funciones más importantes que cubrir».
Las mismas fuentes añaden: «Hace unos meses y a raíz de una modificación del reglamento de circulación, algunas ciudades importantes sentaron jurisprudencia en materia de sentencias a favor de los controladores de ORA, y por ese motivo se decidió otorgarles a ellos las competencias. Además, los magistrados entendían que los informes (multas) que hacían los operarios casi siempre eran válidos porque quien los hacía no era un particular, sino que se trataba de un colaborador de los servicios públicos y que son especialistas en la materia».
García, ejerciendo de portavoz de la empresa privada Dornier, subcontratada para tal efecto, presentó a los medios un amplio listado de decretos de alcaldía y algunas referencias de sentencias favorables a los controladores.
Según los expertos en la materia, las denuncias por infracción pueden ser de dos tipos: Modalidad 'A', se trata de una denuncia voluntaria, es decir aquella que puede interponer cualquier ciudadano contra otra persona y que deben presentarse pruebas para que tengan efecto; y la Modalidad 'B', que son aquellas impuestas por los agentes de la Policía Local y que por el simple hecho de ser autoridad prevalece su capacidad sancionadora.
«Los controladores de la ORA no tienen facultades para ejecutar las sanciones, por tanto son perfectamente recurribles. Hay que pensar que tal y como se expiden las sanciones actualmente carecen de la presunción de veracidad. Algo muy distinto sería en el momento en el que un agente la ratifica», concluye un letrado experto en la materia.
El portavoz de la Policía Local concluye: «A día de hoy, puedo asegurarte que no tenemos a ningún policía ratificando multas de ORA».
A partir de ahora, uno de los secretos mejor guardados de la empresa concesionaria y de la jefatura de policía queda al descubierto y se espera una gran avalancha de recursos.
Una trabajadora de la ORA afectada por tal situación manifestó: «Si hasta hoy teníamos problemas con los conductores imagínate ahora nadie va a querer pagar las multas».