En Balears, hay 3.605 menores que viven lo que se denomina una infancia invisible. Ni protestan ni nadie cuida de ellos. La cifra representa a los niños y niñas que fueron víctimas de violencia de género en el ámbito familiar en 2007, según un estudio de la Fundació IRes y Save the Children que ayer se presentó en el Centre de Cultura sa Nostra.
Los 3.605 menores vivieron en un contexto de violencia física o psicológica en el propio hogar y, por lo tanto, fueron «víctimas directas por el hecho de convivir en medio de este clima», según Montserrat Tohà, directora de la Fundació IRes.
Para realizar el cálculo, la entidad utilizó las denuncias por violencia de género interpuestas en 2007 (2.612) y la media de hijos que tienen las mujeres de las Islas (1'38 hijos). La organización pidió a las instituciones que aportaran los datos de cuántos menores habían tratado, información que sólo entregó Mallorca. En total, en 2007 los servicios sociales de esta isla atendieron a 293 menores, una cifra «insuficiente», dijo Tohà.
Tohà insistió en otro factor: «Según el Consejo General del Poder Judicial, los casos denunciados sólo suponen un 15 por ciento de los existentes». De ahí que el número de menores víctimas de la violencia de género en el ámbito familiar «podría ascender hasta los 24.000».
Uno de los aspectos que Tohà resaltó fue el de la necesidad de considerar a los niños, y no sólo a las madres, como víctimas. «Los menores sufren con la situación y perciben el clima de terror, lo que les provoca consecuencias físicas». ¿Cuáles? «Baja autoestima, problemas alimenticios o dificultades de concentración», entre otros. La mayoría de las veces, terminan «normalizando la violencia», lo que acaba transformándose en «actitudes agresivas o sumisas».
Las conclusiones de la jornada, que estuvo centrada en los niños que sufren esta violencia, recogieron la necesidad de incorporar a los menores con la consideración de víctimas en la Llei de Serveis Socials que tramita el Govern, además de introducir profesionales en los juzgados de violencia.